“Un hombre de gran fe”

El domingo 25 de octubre de 2015 el Apóstol Mayor Jean-Luc Schneider realizó un Servicio Divino en la iglesia central Buenos Aires (Argentina), en el cual fue colocado en estado de descanso el Apóstol de Distrito Norberto Passuni. Asimismo, el hasta entonces Ayudante Apóstol de Distrito Enrique Eduardo Minio fue ordenado como nuevo Apóstol de Distrito para Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay.

Ese mismo domingo, la sociedad en Argentina estaba movilizada porque se realizarían comicios nacionales para elección de un nuevo Presidente de la Nación y distintas autoridades gubernamentales. Así, desde temprano había movimiento en las calles. Y casi todos los establecimientos educativos tenían un aspecto diferente al de un día domingo: las puertas estaban abiertas ya que las escuelas son generalmente los lugares dispuestos para que los ciudadanos se acerquen a emitir su voto. Incluso muy cerca de la iglesia central Buenos Aires funciona una escuela. Pero los 1.488 asistentes al Servicio Divino fueron exhortados a descongregarse ordenadamente para que los vecinos pudieran movilizarse con tranquilidad hasta su lugar de votación.

Si bien una elección presidencial es un acontecimiento importante para el país, para los hijos de Dios en Sudamérica había algo que “movilizaba” el corazón de una forma diferente y muy especial: ¡La visita del Apóstol Mayor!

Ya el día viernes 23 de octubre se había ofrecido para él y sus acompañantes una presentación musical festiva en la iglesia central Buenos Airesy al entusiasta “estilo sudamericano”. El sábado 24 tuvo lugar un Servicio Divino en Uruguay, con 5.521 asistentes que viajaron desde todo el país. El domingo 25 y de regreso en Buenos Aires, el encuentro nuevamente tuvo lugar en la iglesia central.

Servicio Divino en Buenos Aires

Acompañaron al Apóstol Mayor los Apóstoles de Distrito Markus Fehlbaum (Suiza), Leonard Kolb (EE.UU), Raúl Montes de Oca (Brasil) y Mark Woll (Canadá), así como el Apóstol de Distrito Norberto Passuni, el Ayudante Apóstol de Distrito Enrique Minio y los Apóstoles de Argentina y Uruguay. El Servicio Divino fue transmitido vía satélite a toda la Iglesia regional, permitiendo que participaran un total de 25.760 almas.

El Apóstol Mayor basó su servir en el texto bíblico de Romanos 12: 13-14: “Compartiendo para las necesidades de los santos; practicando la hospitalidad. Bendecid a los que os persiguen; bendecid, y no maldigáis”. A continuación el coro y la orquesta ofrecieron un sentido himno que comenzaba diciendo “Padre, necesito que te sientes a mi lado...”. Se predisponía así el corazón a la palabra de una forma singular.

Pase a descanso e instituciones

En su alocución de pase a descanso para el Apóstol de Distrito Passuni, el Apóstol Mayor lo describió como un hombre de gran fe, obediencia y coraje, lleno de amor, compartiendo siempre la carga del prójimo. Ha servido al Señor durante 42 años, ha sido Apóstol por 19 años y Apóstol de Distrito por 7 años. “Siento la necesidad de la comunidad y la mía para agradecerle”, expresó el Apóstol Mayor. Lo caracterizó como un hombre de gran fe. Y una fe no sólo en teoría, sino expresada en su obediencia, valor y coraje. “¡Le puedo decir que ha hecho Ud. un gran trabajo!”.

Como sucesor fue ordenado en ese ministerio el ahora Apóstol de Distrito Enrique Minio (55), para Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay. “Es una gran tarea”, dijo el Apóstol Mayor, exhortándolo a asegurarse de que las cosas importantes estén en primer lugar: Jesucristo, la salvación que Él ofrece y su retorno. También le expresó que será su tarea ser una fuente de energía y unidad para los Apóstoles, siervos y hermanos. “Como Apóstol de Distrito, Ud es el arquitecto de la Iglesia del futuro”, dijo, exhortando a “preguntarse a Ud. mismo ¿qué necesitarán los niños y la juventud para ser en el futuro hijos de Dios alegres? Eso no lo puede delegar, esa es su tarea, pero sus hermanos lo van a ayudar. Ser el arquitecto de la Iglesia del futuro: una misión maravillosa y Dios lo va a bendecir en esta tarea”.

Al nuevo Apóstol Guillermo Eduardo Canessa (60), el Apóstol Mayor le expresó que como Apóstol será embajador de Cristo. Y como Jesucristo dijo “Yo soy el buen Pastor”, entonces como embajador el Apóstol será como un pastor. ¿Cuál es la tarea de un pastor? Necesita que el rebaño llegue a la meta, entonces, se trata de conducir a las almas hacia el alimento que proviene de Dios, cuidarlas con la oración y curar con el amor de Dios y el poder del ministerio.

Finalmente el Apóstol Mayor Schneider antes de despedirse agradeció a toda la comunidad reunida, tanto allí como en los lugares de conexión, por las oraciones, por los preparativos y por todo el apoyo brindado.

Al descongregarse por el pasillo de la iglesia central junto al Apóstol de Distrito, los presentes, desde sus bancos agitaban sus manos para saludarle a la distancia. Sus rostros reflejaban la “alegría en Cristo” que de forma particular habían vivido los hijos de Dios en Sudamérica durante estos días.