Dondequiera, como en casa: en lancha a la iglesia

Cruce del río Congo en una lancha a motor: para más de uno significaría unas vacaciones de aventura, para muchos asistentes espirituales es la única posibilidad de llegar hasta los miembros de las comunidades y celebrar el Servicio Divino.

El camino hasta la iglesia y hasta los creyentes es muy diferente en todo el mundo. Mientras que en los distritos sudafricanos los edificios nuevoapostólicos están separados sólo por pocos cientos de metros unos de otros, algunos miembros de las comunidades de Australia, Asia o América viajan muchas horas hasta la comunidad más cercana. Y no lo hacen a pie, sino en ómnibus, auto o avión. También en Europa los caminos a veces son cortos y otras largos.

La meta es el Servicio Divino

En la República Democrática del Congo, en el medio del corazón de África, viven un total de 3 millones de hermanos y hermanas. Los del noroeste de país los atiende espiritualmente el Apóstol de Distrito Michael David Deppner y los del sudeste el Apóstol de Distrito Tshitshi Tshisekedi. El enorme país está dividido en dos áreas de Apóstol de Distrito debido a la gran cantidad de hermanos en la fe que vive allí.

A algunas de las 18.000 comunidades congoleñas que hay en total, los asistentes espirituales sólo pueden llegar por la vía acuática. El Apóstol de Distrito Deppner comparte un video brindando una impresión del viaje hasta los hermanos de la comunidad Kimwabi. La comunidad se encuentra sobre el río Congo en medio de una isla, rodeada de espesos bosques.

A través del Atlántico hasta la comunidad

El Apóstol de Distrito Deppner informa: "Viajamos en una lancha desde Muanda (Provincia Central del Congo) primero a mar abierto, al Océano Atlántico y después un trayecto por el río Congo, que tiene 4400 kilómetros de largo, cruzando bosques de mangles bien hasta el interior". Cuando llega a la comunidad junto con los Apóstoles Di-Bilufuene Lambert Matita y Nsakala Michel Tati así como el Obispo Buabua, ya los están esperando los hermanos en la playa.

Es una playa especial, como explica el Apóstol de Distrito Deppner: "La costa está formada por miles de ostras y caracoles que se fueron apilando en el curso de los años". Las personas viven aquí del comercio de moluscos.

Servicio Divino en la playa

100 hermanos y hermanas en la fe se alegran por la visita de los Apóstoles y cantan para darles la bienvenida. Por la noche tienen lugar muchas conversaciones y a la mañana siguiente, el Apóstol junto a los hermanos en la fe celebraron el Servicio Divino. El Apóstol de Distrito predicó en idioma francés, el que en el altar fue traducido en forma simultánea al kikongo y al lingala; estos idiomas oficiales son los que se oyen en todas partes en el oeste del país.

El viaje a las comunidades es diferente. Lo sabe muy bien el Apóstol de Distrito Deppner. La próxima vez, cuando para llegar a destino no tenga que ir por agua, quizás tome la moto para recorrer las angostas calles llenas de barro.

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