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Las mentiras del maligno, una lección de autodefensa

febrero 23, 2016

Autor: Andreas Rother

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Vencer con Cristo también significa rechazar los ataques contra la fe. ¿Cómo uno se arma con la verdad en contra de las mentiras? Realmente es muy sencillo. Una lección de autodefensa de un Servicio Divino del Apóstol Mayor.

«Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo. Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que está en vosotros, que el que esta en el mundo». Así dice el texto bíblico de 1 Juan 4:1 y 4, sobre el que predicó el Apóstol Mayor Jean-Luc Schneider el 10 de enero de 2016 en Uyo (Nigeria).

Hacer todo con Dios

El espíritu de abajo intenta separar al creyente de Dios, fue el tenor del Servicio Divino. Sólo se puede vencer este espíritu si Dios es grande en el propio corazón. Al respecto el Apóstol Mayor mencionó cinco ejemplos.

Mentira número uno: «No necesitáis a Dios; podéis ser como Él; podéis arreglaros sin Él». Esto se lo insinuó la serpiente a los seres humanos ya al comienzo de su historia. Para «resistir a esto debemos hacer como los niños». Un niño sabe que necesita a sus padres porque muchas cosas no las puede hacer solo. «Hay tantas cosas que no entendemos sin Dios, que no sabemos sin Él y que no podemos hacer sin Él. La realidad es que necesitamos a Dios y nada queremos hacer sin Él».

Librar la fe de finalidades terrenales

Mentira número dos: «Si no tenéis éxito, si estáis enfermos, si no tenéis dinero, entonces vuestra fe no es lo suficientemente grande». Este espíritu quiere ligar la fe con la vida terrenal. De esta manera Satanás también tentó a Jesús en el desierto. El Hijo de Dios siempre respondió con una palabra de su Padre, pues eso era lo que vivía en su corazón. «Buscad primeramente el reino de Dios», dijo el Apóstol Mayor señalando las palabras de Jesús de Mateo 6:33. «Esto vive en nosotros y por eso no perseguimos con nuestra fe finalidades terrenales».

Confiar en la fortaleza de Cristo

Mentira número tres: «Jesús no dice la verdad; su Evangelio no funciona en mi caso». Los adversarios de Dios hoy parecen muy poderosos y burlan a los creyentes. Pero con la certeza de que Dios era el que luchaba por él, ya David triunfó sobre Goliat. «Jesús, su amor y su espíritu nos dicen: Confía en Jesucristo. Nadie es tan perfecto y fuerte como Él; al final Él será el vencedor».

Quedar fiel a Jesús por amor

Mentira número cuatro: «El Señor tarda en venir. Él demora la promesa». A María le había sido prometido que el reino de su hijo no tendría fin. Y cuando Él terminó en la cruz, todo parecía falso. «Pero ella quedó con Jesús, pues ella lo amaba». También «nosotros quedemos con Él porque lo amamos. Nuestro amor a Jesucristo es mayor que todo lo demás».

Dejarse preparar por Apóstoles

Mentira número cinco: «Esos no son verdaderos Apóstoles. Ellos no tienen poder». El ministerio de Apóstol de este tiempo no se muestra obrando milagros, dijo el Apóstol Mayor y se refirió primero a exigencias con características regionales. «Nuestra respuesta a esto es: soy consciente de que estos hombres no son perfectos, pero ellos creen en su envío. Yo creo que ellos me pueden preparar para el retorno de Cristo».

«Estos son espíritus contra los cuales tenemos que luchar hoy», dijo el Apóstol Mayor para finalizar. «Pero en nuestro corazón hay uno que es mayor que el que está en el mundo. Por eso estamos en condiciones de resistir a todas esas influencias».

febrero 23, 2016

Autor: Andreas Rother

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