Hamburgo/Zúrich. Apóstol Mayor Wilhelm Leber, el cabeza internacional de la Iglesia desde 2005, celebró el domingo de Pentecostés su último servicio divino en la comunidad de Hamburgo-Borgfelde (informamos). Varios millones de personas en el mundo vivieron la prédica en directo vía satélite o internet. El Apóstol Mayor llamó a los creyentes a que utilicen la fuerza del Espíritu Santo en su entorno.
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La última prédica de Pentecostés de Wilhelm Leber como Apóstol Mayor
Foto: NAK Nord
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El edificio impresionante de la comunidad de Hamburgo-Borgfelde
Foto: NAK Nord
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Ambiente de alegría antes del servicio divino
Foto: NAK Nord
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Dos imágenes del concierto de Pentecostés…
Foto: NAK Nord
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…en la Laeiszhalle en Hamburgo (Fotos: INA Alemania del Norte)
Foto: NAK Nord
Tradicionalmente el Apóstol Mayor se dirigió al comienzo del servicio divino con una palabra de saludo a los cristianos nuevoapostólicos en todo el mundo: „He aquí, el Señor ha proclamado hasta los confines de la tierra: Decid a la hija de Sion: «¡He aquí, tu salvación viene; he aquí, su galardón está con El, y delante de El su recompensa.!» (Isaías 62:11).
«Dios interviene»
El Apóstol Mayor enfatizó que entiende la palabra como una promesa de Dios. «El Señor intervendrá. No siempre de la manera que esperamos y deseamos, pero sí de tal manera que al final podemos concluir que todo debe ser así.» De esta manera Dios siempre ha vuelto a ayudar y ha intervenido en la historia de la humanidad, por ejemplo cuando envió a Su Hijo. «Y de esta manera continuará», añadió. Con motivo del 150 aniversario de la Iglesia Nueva Apostólica se muestra agradecido por todo lo que se ha realizado en el pasado, pero al mismo tiempo añadió que «queremos aprovechar el aniversario de nuestra Iglesia para sacar fuerzas para el futuro.»
Fuerzas desde lo alto
La palabra bíblica de Lucas 24:49: «(…) Mas vosotros asentad en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de potencia de lo alto.», fue la base para la prédica del servicio divino de Pentecostés. Este texto ya lo fue para el servicio divino de Pentecostés en 2005. En ese año el Apóstol Mayo recibió su cargo. «No era consciente de ello cuando elegí esta palabra», comenta el Apóstol Mayor. Para él se cierra un círculo.
«El Espíritu Santo es la fuerza desde lo alto», aclaró el Apóstol Mayor el texto de la Biblia. Es su deseo que la fuerza del Espíritu Santo se note aún más. Esto se puede mostrar de muchas maneras: En la colaboración en las comunidades, en el amor entre los hermanos así como en la firmeza en la promesa del retorno de Cristo.
El viento del amor debe de notarse en las comunidades
En su prédica el Apóstol Mayor se refirió a la imagen del Espíritu Santo como el viento: «El viento sopla donde quiere y oyes su sonido, pero no se sabe de dónde viene ni adónde va. Así es todo aquel que es nacido del Espíritu.» (Juan 3:8). «La vida en la comunidad debe caracterizarse por el viento del Espíritu», hizo el llamamiento a los creyentes. El amor debe consolidarse de tal manera que las resistencias se quedan apartadas. No se trata de realizar grandes hazañas: «Pero si trabajamos juntos en este sentido y si cada uno se muestra abierto al obrar del Espíritu Santo, entonces esto se convertirá en un potente huracán. Esto llevará a la perfección, hacia el día del Señor.»
Llevar el amor de Dios a los demás
El Apóstol de Distrito Jean-Luc Schneider, encargado desde hace un año como Ayudante de Apóstol Mayor, hizo hincapié durante su servir en la tarea de los cristianos llevar el amor de Dios a los demás, de modo que se puede ver el amor en nosotros. Bien es verdad que Dios es la ayuda que muchas personas buscan, también es necesario la fe para reconocer la ayuda divina. «Si actuamos de esta forma, todos se sentirán a gusto en las comunidades – en todas las partes de la tierra.»
El sucesor del Apóstol Mayor también hizo comentarios sobre el cambio en el nivel más alto de la Iglesia. Muchos le han preguntado cómo seguirá la Iglesia a partir de ahora. «Seguiremos igual que hasta ahora. ¡Hacia la meta de nuestra fe!», prometió el Ayudante de Apóstol Mayor.
Un servicio divino en un lugar histórico
La retransmisión comenzó antes del servicio divino de Pentecostés con una película en la que la Iglesia Nueva Apostólica contempla su 150 aniversario. También se pudo ver la primera comunidad que se separó de la Iglesia Católica Apostólica en 1863. De ella se originó la Iglesia Nueva Apostólica.
Esta comunidad hamburguesa más tarde construyó una capilla en el mismo lugar donde se encuentra ahora la comunidad de Hamburgo-Borgfelde, en la que el Apóstol Mayor Leber ha celebrado el servicio divino de Pentecostés de este año. Unos 450 cristianos nuevoapostólicos se reunieron allí, entre ellos todos los Apóstoles de Distrito y Ayudantes de Apóstol de Distrito en el mundo así como los Apóstoles europeos.
La asamblea de Apóstoles y concierto
El Apóstol Mayor comenzó el fin de semana de Pentecostés con una asamblea de Apóstoles, durante la cual contempló su periodo en el cargo y pidió a los Apóstoles que confiaran en el nuevo Apóstol Mayor. El sábado por la tarde tuvo lugar un concierto en la Laeiszhalle en Hamburgo bajo el lema I feel the spirit (Siento el Espíritu). Cinco conjuntos musicales presentaron una mezcla de música espiritual y de melodías más modernas.