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En foco 2/2024: ¿Subir a un monte para orar?

enero 16, 2024

Autor: Tshitshi Tshisekedi

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El Apóstol de Distrito Tshitshi Tshisekedi (RD Congo Sudeste) recorre los montes para encontrar el lugar adecuado para la oración. Qué significa la imagen del monte para la oración y qué lugar recomienda Jesús, escribe en el segundo “En foco” de este año.

En mi país, la República Democrática del Congo, es tradición en los círculos cristianos que los creyentes vayan a las colinas, llamadas montes de oración, para ofrecer oraciones a Dios. ¿Nosotros, como cristianos nuevoapostólicos, también conocemos algo así?

Ir a los montes para orar se remonta a tiempos antiguos. En aquella época, los montes se consideraban lugares adecuados para los encuentros con los dioses. Los israelitas también continuaron esta tradición. En la Biblia leemos que Dios se apareció a Moisés en un monte. Más tarde, el monte fue sustituido por el templo, construido en una colina. El templo era entonces el lugar de encuentro entre Dios y su pueblo.

En el nuevo pacto, la transfiguración de Jesús tiene lugar en un monte. Su objetivo era establecer una conexión con el antiguo pacto. La relación de Jesús con su Padre era aún más fuerte que la de los patriarcas con Dios. Entonces, ¿por qué abandonó Jesús el monte para orar? Ante todo, quería escapar de las multitudes y buscaba un lugar donde retirarse.

Para nosotros, los cristianos nuevoapostólicos, subir a un monte para orar es una imagen. Significa que, para que nuestras oraciones sean efectivas, tenemos que elevarnos por encima de las preocupaciones de la vida cotidiana, dejar atrás el ruido de la ciudad y subir a las alturas de la fe.

Para ello, nos remitimos al pasaje bíblico del Evangelio de Juan en el capítulo 4, versículos 19 a 24:

“Le dijo la mujer: Señor, me parece que tú eres profeta. Nuestros padres adoraron en este monte, y vosotros decís que en Jerusalén es el lugar donde se debe adorar. Jesús le dijo: Mujer, créeme, que la hora viene cuando ni en este monte ni en Jerusalén adoraréis al Padre. Vosotros adoráis lo que no sabéis; nosotros adoramos lo que sabemos; porque la salvación viene de los judíos. Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren. Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren”.

enero 16, 2024

Autor: Tshitshi Tshisekedi

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