Mozambique: Partida a un nuevo país (parte 1)

¿La Iglesia no sabe dónde están las comunidades? Sí y no... Se dispone de un panorama general; sin embargo, se carece de información actual y detallada sobre las comunidades de Mozambique. Esto está a punto de cambiar fundamentalmente. “Según nuestros registros tenemos 1.326 comunidades, pero sabemos muy poco de ellas. El proyecto tiene como objetivo comprobar la existencia de las comunidades, la situación en que se encuentran las propiedades, las coordenadas de GPS y las imágenes de cada uno de los edificios”, informa el director de la administración.

El hecho de que la administración de la Iglesia quiere saber más se explica rápidamente: Solo cuando la administración responsable de la Iglesia sabe dónde y cuán grandes son las comunidades, con cuántos portadores de ministerio cuentan, pueden abastecer a las comunidades: proporcionarles materiales de enseñanza, capacitar a los portadores de ministerio.

Trabajo de pioneros digitalizado

Por otro lado, este trabajo de pioneros es necesario que esté digitalizado para completar el libro de direcciones internacional con datos fiables. Hay 58.500 comunidades nuevoapostólicas en todo el mundo; en la base de datos de direcciones mundiales ya están registradas comunidades de 53 países. Actualmente, muchos países están trabajando para completar estos datos.

Y en el futuro, las comunidades de Mozambique también estarán disponibles en esta base de datos, que se pondrá a disposición de todos los interesados en http://adresses.nak.org o en la app nacmaps. Este es un proyecto que los servicios de comunicación de la Iglesia Nueva Apostólica Internacional están realizando desde hace varios años y cuyos resultados ya están siendo utilizados activamente por muchos miembros de las comunidades durante sus viajes.

28 millones de personas viven en Mozambique, este país situado en el Océano Índico. La región fue sacudida por años de guerra civil. En el país, de carácter predominantemente cristiano, viven 196.000 cristianos nuevoapostólicos. Hay 4.500 portadores de ministerio activos en ministerios diaconales y sacerdotales que trabajan en once áreas de Apóstol.

Para un café con el Apóstol de Distrito

Sin embargo, se necesita algo más que un informático experimentado y una base de datos: “La labor de verificación y cartografía de las comunidades de Mozambique es una tarea especial. Como hay muy pocos caminos y los lugares de reunión van desde 'bajo un árbol' hasta una dirección fija”, explica el Apóstol Worship, lo primero que necesitamos es realizar el trabajo básico. Y para eso se requiere la ayuda de la gente local.

“A fines de 2017, el Apóstol de Distrito Kriel me invitó a tomar un café con él. No tenía conocimiento de sus intenciones”, informa el Obispo Alvin Witten con una sonrisa. La conversación cambió su vida y la de su familia, porque “durante esa conversación el Apóstol de Distrito me preguntó si podía imaginarme mudándome a Mozambique”. El Apóstol de Distrito necesitaba alguien que le ayudara con la administración en ese país.

¿Por qué usted y no otro? El Apóstol de Distrito lo conocía como amante de los viajes en coche y que era duro en lo que emprende. “Así que conocía nuestro carácter y dijo que tenía que enviar a alguien que estuviera dispuesto a enfrentar casos difíciles. Dejó claro que esto no sería un picnic”. Y el Apóstol de Distrito también le dio algunos consejos para el viaje: tener bajas expectativas o, mejor aún, ninguna expectativa en absoluto.

“Si vienes de Ciudad del Cabo, donde todo es organizado y hermoso, uno puede imaginar nuestras preocupaciones”. Pero estábamos preparados para dar lo mejor de nosotros. Creíamos que si Dios nos quería allí, nos protegería. “Ciudad del Cabo se encuentra en la punta de África. Así que dondequiera que viajemos fuera de las fronteras, está muy lejos”, explica el emprendedor, pero también reflexivo Alvin Witten. Hay solamente 2.000 kilómetros de Ciudad del Cabo, donde viven amigos y familiares, a la capital Maputo, en el sur de Mozambique. El norte del país está a otros 2.000 kilómetros de distancia.

Alvin Witten y su esposa Jean están de acuerdo después de un corto período de consideración.

Estar de acuerdo y mudarse

“Inmediatamente comenzamos nuestra investigación sobre el país y reunimos toda la información posible”, recuerda Alvin Witten. Y luego había cuestiones legales que debían resolverse: ¿Las autoridades mozambiqueñas concederían un permiso? ¿Cumplían Alvin y Jean Witten todos los criterios para que se les permitiera trabajar y vivir en Mozambique? “Este proceso fue largo y arduo”.

Pero luego la cosa se puso seria: “El siguiente paso fue una visita a Mozambique para ver el país de cerca. Nunca habíamos estado allí antes”. Desde Sudáfrica, el matrimonio Witten partió hacia Mozambique, al este de África.

En las dos partes que siguen del informe de Mozambique, los Obispos Alvin Witten y Chris van Wyk informan sobre la búsqueda de las comunidades en el monte, operaciones militares inesperadas y la interacción satisfactoria de los proyectos internacionales de tecnología informática de la Iglesia con Mozambique y Sudáfrica.