Animales y movimiento

Ya sea murciélagos o músicos de orquesta: pasan muchas cosas en las comunidades nuevoapostólicas. En los últimos días ha habido actividades muy movidas en Europa, América y África.

Dos orquestas, un concierto

“Juntos como uno” fue el lema bajo el cual las dos orquestas sinfónicas asociadas de Suiza y Alemania del Oeste habían cursado las invitaciones para el 3 de septiembre. Unos 1.000 oyentes acudieron a la sala de conciertos a orillas del lago de Zúrich para vivir un concierto muy variado. Las dos orquestas interpretaron una mezcla de piezas sacras y populares de películas y musicales. Contaron con el apoyo de un coro suizo.

Mucho movimiento en el Servicio Divino del aniversario

La comunidad Los Polvorines (Argentina) cuenta ya con al menos 50 años de historia. Para celebrar esta ocasión, 192 hermanos en la fe e invitados se reunieron el 20 de agosto en el edificio de la iglesia en la ciudad del Gran Buenos Aires. El Apóstol Pablo Basso dirigió el Servicio Divino de fiesta junto con el dirigente de distrito Jorge Segarra. El Apóstol situó el Servicio Divino bajo el pasaje bíblico de Juan 10:9: “Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará y saldrá, y hallará pastos”. También contó a la gran comunidad festiva la historia de Los Polvorines: el primer Servicio Divino se celebró en el hogar de una familia ya en 1959. Más tarde se fueron uniendo cada vez más miembros de la comunidad, de modo que en 1973 el Apóstol de Distrito Aureliano Martón consagró el edificio de la iglesia para la comunidad. 50 años después la comunidad ha crecido y prosperado, celebrando ese día junto con muchos invitados.

En Sudáfrica la juventud está activa

En muchas comunidades de Sudáfrica, el primer fin de semana de agosto los jóvenes se reunieron en un encuentro especial. Bajo el lema “Dare2Care” (atrévete a ayudar) tuvieron lugar muchas actividades emocionantes. Los jóvenes de Mpumalanga, Kimberely y KwaZulu-Natal se reunieron en Durban con el objetivo de pasar un fin de semana divirtiéndose, practicando el amor al prójimo y aprendiendo más sobre la fe. Un invitado especial fue el Apóstol de Distrito John Kriel: el domingo celebró el Servicio Divino con los jóvenes de la comunidad Wentworth. La base fue 1 Timoteo 4:12: “Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza”. El Ayudante Apóstol de Distrito Mandla Patrick Mkhwanazi y el Anciano de Distrito Scott también contribuyeron a la prédica. Aquí, como en muchos otros lugares de Sudáfrica, durante este fin de semana se hicieron muchas amistades y se ganaron experiencias.

Alpacas y murciélagos

Un día de verano de principios de julio, los caminos de la granja de Ohrdruf (Alemania) se tiñeron de verde. No fue que de repente brotara el pasto, sino que se contó con la presencia de 85 niños y sus acompañantes, todos con remeras verdes de Kids-aktiv. Estaban allí para una excursión junto a alpacas. Varios niños se agruparon y recibieron juntos una alpaca, que luego guiaron por la zona. Tras un almuerzo a base de salchichas y papas fritas, hubo una fiesta de batidos con torta para fortalecerlos para lo que los esperaba en ese día lleno de acontecimientos. Luego fueron a la exposición de la Noche de la Ciencia de Ilmenau, donde los aguardaban experimentos emocionantes, perros robot y juegos de computadora en 3D.

Los murciélagos son “súperanimales”, coincidieron los niños del distrito Nagold (Alemania) después pasar un día con estos animales. El 27 de julio, más de 30 niños interesados y sus padres se reunieron en la iglesia de Herrenberg. Allí escucharon atentamente a la experta en murciélagos Ilona Bausenwein. Entre otras cosas, explicó que los murciélagos tienen ocho corazones, pueden volar hasta 100 kilómetros por hora y no les gustan los sonidos repentinos. Llevaba con ella murciélagos a los que había curado de sus heridas. Todos pudieron ver de cerca a Fidel, un murciélago vespertino, que, mientras la experta en murciélagos iba de niño en niño, se comió unos 30 gusanos de la harina. Después, los niños también comieron algo, pero afortunadamente no eran gusanos.

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