En lo alto de la ciudad y punto central de la comunidad

La iglesia Eldorado Km 9, en Argentina, llama la atención: está ubicada en uno de los lugares más altos de la ciudad y mezcla diferentes estilos y épocas. Construida por los propios hermanos y hermanas en la fe, ha sido un baluarte a lo largo de los tiempos y este año celebra su 85° aniversario.

El nombre de la comunidad es Eldorado Km 9 y una comunidad vecina se llama Eldorado Km 28. Los números indican la distancia al río Paraná, que fluye cerca de la ciudad.

Lo primero que llama la atención en Eldorado Km 9 es el campanario, en el que salta a la vista el emblema nuevoapostólico. Dos columnas de estilo griego sostienen el frontis triangular. Se accede a la nave a través de una cortina roja aterciopelada. Una gran y pesada puerta de madera con adornos blancos conduce al recinto principal. El altar de madera es del mismo color oscuro. El techo, la barandilla de la galería y los bancos también son de madera.

La fe inmigra de Europa

Los inmigrantes llegaron de Europa y trajeron la fe nuevoapostólica, profundamente arraigada en ellos, a Eldorado alrededor de 1935. Y dieron testimonio de ella.

Por ejemplo, el Pastor Johann Vögeli, de Suiza, que celebró los primeros Servicios Divinos en su casa con su familia. Invitaba a vecinos y conocidos, recorriendo hasta 20 kilómetros a caballo para realizar visitas de asistencia espiritual.

Terreno con un propósito

El 22 de agosto de 1936, el Ayudante Apóstol Mayor Heinrich Franz Schlaphoff visitó la naciente comunidad. Dispensó el Sacramento del Santo Sellamiento a 27 creyentes y ordenó a los primeros portadores de ministerio. Los Servicios Divinos, que entonces aún se celebraban en alemán, pronto fueron enmarcados por un pequeño coro.

El Subdiácono Adolfo Blaser donó el terreno para la construcción de la iglesia. Lo había comprado mucho antes de conocer la fe nuevoapostólica, con la condición de que se construyera allí una iglesia. Por eso no dudó en poner el terreno a disposición de la comunidad nuevoapostólica.

Los hermanos y hermanas construyeron ellos mismos gran parte de la iglesia a fines de los años 30. Por aquel entonces no había electricidad y los hermanos y hermanas subían el agua a lo alto del terreno ellos mismos con carros tirados por bueyes. Los bancos hechos a mano por los primeros miembros de la comunidad aún pueden verse hoy en la nave.

Inauguración con obstáculos

En 1938 se excavaron los cimientos y se colocó la piedra fundacional. En una cápsula del tiempo, los creyentes colocaron un pergamino con los nombres de todos los que participaron en la construcción y el texto bíblico de Isaías 28:16: “Por tanto, Jehová el Señor dice así: He aquí que yo he puesto en Sion por fundamento una piedra, piedra probada, angular, preciosa, de cimiento estable; el que creyere, no se apresure”.

En la primavera de 1939 había llegado el momento: la iglesia –de estilo entre neorromántico y clásico– estaba lista para ser ocupada. Se imprimieron y distribuyeron invitaciones en alemán y español. Incluso vehículos con altavoces anunciaron en la ciudad la inauguración de la iglesia.

El Servicio Divino de inauguración estaba previsto inicialmente para el 28 de mayo de 1939. Sin embargo, fue postergado unos días porque las fuertes lluvias habían convertido las calles en barro y las carreteras estaban intransitables. El Ayudante Apóstol Mayor Schlaphoff celebró finalmente la inauguración el 4 de junio de 1939, con la asistencia de representantes de las autoridades y un conjunto instrumental acompañando el festejo.

“Dios ha estado con su pueblo”

Eldorado Km 9 creció en los años siguientes. En 1978, más de 700 hermanos y hermanas asistieron al Servicio Divino con el Apóstol Mayor Ernst Streckeisen. Los portadores de ministerio, por encontrarse cerca de la frontera, atendían también a comunidades en Paraguay y el sur de Brasil.

Pronto se hizo necesaria una renovación. Además de rediseñar la pared trasera del altar, se renovó la iluminación, se instaló un nuevo sistema de aire acondicionado y se remodeló la iglesia para hacerla accesible a discapacitados. El Apóstol Jorge Cabanelas celebró la reapertura de la iglesia junto a la comunidad el 1° de octubre de 2000.

23 años más tarde, visitó la comunidad el Apóstol Mayor Schneider. Fue proyectado un vídeo realizado por miembros de la comunidad sobre la historia de la iglesia. Y hubo un concierto con coro de niños, coro y solistas. “¿Cuál será el futuro de la iglesia?”, habrán pensado muchos cuando la comunidad fue consagrada en 1939. Lo mencionó el Apóstol Mayor en su alocución. “Pero la comunidad creció y se fortaleció. Dios ha estado con su pueblo”.

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