Activos en la fe y en la vida cotidiana

Trabajar por el medio ambiente

¿Cómo podemos, especialmente como cristianos, hacernos responsables de la creación? ¿Cómo podemos ser más sostenibles como comunidad de la Iglesia? Estas fueron las preguntas que se hicieron los miembros de la comunidad de Ilmenau (Alemania). Junto con las asociaciones inscriptas “Iniciativa Responsabilidad por la Creación de la Iglesia Nueva Apostólica” y la “Asociación de promoción de la Iglesia Nueva Apostólica Ilmenau”, el 8 de octubre estuvieron un poco más cerca de encontrar las respuestas. Con conferencias y debates abiertos, los hermanos en la fe de Ilmenau elaboraron un plan a lo largo de la tarde sobre cómo quieren ser más sostenibles como comunidad en el futuro:

• El edificio de la Iglesia debe ser energéticamente autosuficiente.
• En los refrigerios que se preparan en la Iglesia y los festivales comunitarios, la comida debería ser más sostenible (por ejemplo, vegetariana, regional y de temporada).
• Los desplazamientos a los Servicios Divinos y otros actos deberían planificarse de forma más ecológica (por ejemplo, compartiendo el auto y en bicicleta).
• Los terrenos de la Iglesia deberían ser más verdes.

La “Iniciativa Responsabilidad por la Creación” entregó entonces a la comunidad la etiqueta de “comunidad sostenible”.

Después, hubo mucho que aprender sobre el medio ambiente, el agua, el clima, el reciclaje, los animales y las plantas.

Para que todos en lo posible queden sanos

Recientemente se ha instalado un desfibrilador en la pared exterior del edificio de la comunidad de Camberley (Gran Bretaña), claramente visible y accesible para todos. Dado que el edificio está situado en una zona céntrica –hay un club de bowling, canchas de tenis y escuelas en las cercanías–, el municipio local decidió colocar el desfibrilador en la Iglesia.

Los voluntarios de la Iglesia Nueva Apostólica hacen mucho, a veces demasiado. Algunos se dan cuenta de que es demasiado para ellos y que tendrían que poner un límite, recién cuando ya es demasiado tarde y se encuentran en pleno síndrome de burnout. Para ayudarles a reconocer los síntomas del burnout desde el principio y explicarles sobre los mecanismos de afrontamiento del estrés, cada uno de los portadores de ministerio y maestros de la escuela dominical fueron invitados a una charla con miembros del distrito de Lentegeur (Sudáfrica) el 20 de octubre. Un psicólogo dio importantes consejos y recomendaciones a los presentes.

Educación sin importar la edad

No todos los niños pueden esperar el comienzo de la escuela sin preocupaciones. Si los padres no pueden pagar las tasas escolares o el material escolar necesario, la educación de los niños corre riesgo. En el área de actividad del Apóstol Sédjro Kodjo Amevoh en Togo, 550 niños ya no tienen que preocuparse por empezar la escuela. Gracias a las donaciones del distrito de la Iglesia de Ostwestfalen-Lippe (Alemania) y de la asociación benéfica UGUS (Un gesto, una sonrisa) de la Iglesia Nueva Apostólica en Togo, los niños recibieron un paquete de inicio escolar en mochilas cosidas a mano: lápices, cuadernos, reglas, sobres, materiales de geometría… todo lo que necesitan estaba incluido. Además, se pudieron cubrir los gastos de escolarización de 19 niños. “Estoy feliz”, dice Nadège al recibir su paquete de inicio de curso. “Ahora estoy preparada para el comienzo de la escuela, porque tengo mi material escolar y el comienzo de la escuela ya no es una preocupación para mí”.

Una generación muy diferente también pudo volver a sentarse en los bancos de la escuela en octubre. Los adultos mayores de Devon Park (Sudáfrica) se reunieron de nuevo en la nave después de un Servicio Divino y compartieron un pequeño refrigerio, mientras una enfermera dio una charla sobre temas de salud y cuidados sanitarios preventivos, dirigida específicamente a esa generación.

Asistir al Servicio Divino

El 13 de noviembre, la comunidad de Ngulungu (RD del Congo) pudo disfrutar de un nuevo edificio para su Iglesia. El Apóstol líder Jean Paul Mbikayi inauguró el nuevo edificio y contó la parábola de las dos personas que querían construir una casa. Uno la construyó sin cimientos sobre suelo arenoso, el otro sobre suelo sólido. La casa del segundo duró. Le deseó a la comunidad que su fe fuera estable como la segunda casa.

Y para llegar al Servicio Divino primero hay que encontrar la Iglesia. Desde el mes de septiembre, todo aquel que llegue a la ciudad de Leipheim (Alemania) encontrará siempre un cartel anunciando los Servicios Divinos nuevoapostólicos, independientemente del lado por el que entre a la ciudad.