Ayudar antes de que la gente tenga que huir

«Levantar puentes, así también se podría sintetizar el trabajo de nuestras organizaciones caritativas de la Iglesia, que está dirigido principalmente a la ayuda para refugiados», escribe el Apóstol Mayor e.d. Wilhelm Leber como patrocinador en su palabra de salutación.

Con la ola de refugiados proveniente del Cercano Oriente, Afghanistán y África, Europa se vio en 2016 confrontada a un desafío especial, explica el director comercial Jörg Leske en su prólogo. Guerras, hambre, destrucción ambiental expulsarían en el futuro a muchas más personas de su patria.

Ayudar: aquí, allá y en el camino

¿Qué puede hacer NAK-karitativ? El presidente del directorio de la entidad ve tres puntos de partida:

• Mejorar las condiciones de vida en los países de los que la gente huye
• Asistencia y acompañamiento allí donde las personas están en camino
• Ayuda al llegar a los países de destino

El informe anual brinda ejemplos de esto con muchos grandes y pequeños proyectos: el proyecto de ayuda voluntaria para refugiados en Dortmund (Alemania), que va desde cursos de idioma hasta acompañamiento en el ingreso escolar, visitas a médicos, autoridades y búsqueda de vivienda hasta donaciones en especie. O la cooperación con la escuela Bergisches Kolleg en Wuppertal, a fin de ayudar a refugiados jóvenes a afianzarse en el mundo profesional.

Entre los proyectos más grandes se contó en 2016 el trabajo conjunto con la organización colega «Help – ayuda para la autoayuda» en Grecia. Allí se tuvieron que quedar bloqueadas en marzo de 2016 unas 55.000 personas, cuando los países de los Balcanes cerraron las rutas de huida. NAK-karitativ ayudó, entre otras, a 5000 familias y a más de 19.000 niños proveyendo vestimenta y artículos de higiene, a 2000 familias a organizar un refugio provisorio, como también a hacer posibles 400 sesiones psicológicas para resolver el trauma de esas personas.

La sustentabilidad es el mandamiento supremo en los proyectos que deben mejorar la situación de vida localmente. Formaron parte de ello en 2016 ante todo la construcción de un lugar de colección y elaboración de leche en Níger, el desarrollo de pequeños emprendimientos en Armenia, la instalación de un establecimiento de producción de toallitas reutilizables, así como asegurar la provisión de agua para 13 aldeas y 400 escuelas, ambas en Kenia.

Ayuda en cifras

En el ejercicio 2016 el directorio aprobó un total de 21 nuevos proyectos con un volumen total de más de 2,6 millones de euros para un período por lo general de varios años. De los años previos siguieron en vigencia 49 proyectos.

El punto culminante es el compromiso en África, al que se destinan unos dos tercios de los gastos del proyecto. El resto recae en medidas que se toman en Europa (14 por ciento), Asia (12 por ciento) y América (7 por ciento).

NAK-karitativ gastó en total el año pasado casi 2,6 millones de euros. El 88 por ciento de los mismos fue a parar a la pura promoción de los proyectos. El resto a los gastos de personal y administrativos.

Este compromiso se financia ante todo con donaciones individuales (1,5 millones de euros), pero también con padrinazgos (270.000 euros), herencias y descuentos, así como con acciones perdurables (cada uno de 180.000 euros).

Por pagos recibidos de donaciones se observó un retroceso frente al año anterior. Sin embargo, esto responde a una tendencia general. Pues en 2015 el terremoto de Nepal y la llegada de refugiados a Alemania se habían ocupado de que la disposición a ofrendar fuese mayor.

Ayuda para los que ayudan

Involucrar intensivamente a los colegas locales en las áreas de operación. Esto es una premisa importante de NAK-karitativ. Pero esto también significa fortalecer en forma perdurable a estos colegas y capacitarlos por medio de especialistas externos. Por eso hubo en 2016 una capacitación de varios días de duración en los temas concepción de proyectos y análisis de repercusiones para la obra caritativa NACRO en Zambia y Malawi.

En 2017 habrá un taller similar para los colegas de KUMEA en Nairobi. Además, NAK-karitativ quiere el año próximo seguir mejorando el trabajo en los países centrales de Zambia, Malawi, Kenia, Gambia y Armenia, y ampliar la red de colaboradores.

Finalmente, en 2017 figura en la agenda un taller de estrategia del directorio con todo el equipo de NAK-karitativ. Aquí se tratarán de definir los objetivos en común para los próximos años y encontrar caminos para reaccionar con mayor efectividad y eficiencia a los desafíos que se vienen.