Como Iglesia preparando una boda

La comunidad, que se había reunido al aire libre en un campo de deportes de Mazabuka (Zambia) el 19 de junio de 2022, contaba con más de 8.200 creyentes. El Apóstol Mayor Jean-Luc Schneider leyó el pasaje bíblico de 2 Corintios 11:2: “Porque os celo con celo de Dios; pues os he desposado con un solo esposo, para presentaros como una virgen pura a Cristo”.

El contexto adecuado

En él, Pablo describe maravillosamente el encargo de los Apóstoles. “Pablo dice que su encargo es preparar a la novia para la gran boda con Jesucristo”. Esta imagen de la boda se utiliza a menudo en la Biblia. Jesús es el Novio, la novia son los elegidos que tendrán comunión eterna con Él después de la reunión de Cristo con los suyos.

“Esta boda es un poco complicada. Porque cada uno tiene su propia idea de lo que constituye una boda”, dijo el Apóstol Mayor. Por lo tanto, las bodas en el cielo no deben interpretarse con el trasfondo de la cultura y la tradición, sino en el contexto de la historia de la creación.

La antigua pareja

Dios creó a Adán del polvo de la tierra y a Eva de la costilla de Adán (ver Génesis 2:7 y 21). “Esto no significa que Eva fuera un subproducto”, subrayó el dirigente de la Iglesia. “Dios hizo esto a propósito. Quería dejar claro que ambos fueron creados a imagen de Dios”. Eva y Adán debían estar juntos. “Es la misma carne, los mismos huesos, uno no puede estar sin el otro”, explicó el Apóstol Mayor. “Cuando Adán vio a Eva, supo inmediatamente: Es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne. Somos el uno para el otro”. Y la Biblia dice: “Y serán una sola carne”.

La nueva pareja

Jesús es el nuevo Adán, explicó el Apóstol Mayor: Jesús es hombre en todos los aspectos, tal como Dios quiere que sea. La nueva Eva son los creyentes, la Iglesia, que ha sido creada por Dios. “Cuando Jesucristo venga otra vez, quiere ver a alguien de quien pueda decir: Esto es carne de mi carne y hueso de mis huesos. Esta es mi naturaleza, mi vida, así es como soy”.

Esto significa que el ser humano, la novia, se ha ido conformando cada vez más a Dios y a su voluntad. “Dios crea una nueva Eva, la Iglesia, los creyentes, que han llegado a ser una nueva creación en Cristo porque han recibido la vida de Cristo a través del don del Espíritu Santo”, explicó el Apóstol Mayor. Y cuando Jesús venga otra vez, tomará a la novia para sí.

El trabajo preparatorio de los Apóstoles

La novia debe ser preparada para la llegada del novio. Y esa es la tarea de los Apóstoles. Preparan a la novia para su boda

• fortaleciendo su fe y su confianza a través de la prédica,
• aumentando su amor a Dios y a sus hermanos en la fe,
• enseñando a guardar los mandamientos de Dios,
• proclamando el perdón de los pecados,
• enseñando a encontrar la gracia de Dios,
• fortaleciendo la comunión en la Santa Cena,
• exhortando a la unidad y
• recordando el retorno.

“Los Apóstoles han sido enviados para preparar el retorno de Jesucristo”, concluyó el Apóstol Mayor. “Mi deseo es que nos mire a ti y a mí y diga: Sí, esto es carne de mi carne, seamos una sola carne, estemos juntos para siempre”.