Con la mano en el disparador: ver en lugar de ser visto

Motivos hay de sobra: el edificio, el altar, el siervo oficiante, y en primer lugar las personas. El que se bautiza y las parejas que se casan, los que cumplen un aniversario y los que los felicitan, los siervos que son instituidos y los que pasan a descanso, los músicos y los que los dirigen. Y naturalmente los sentimientos de la comunidad: alegría, emoción, fervor, cordialidad.

Dar testimonio con la cámara

En realidad, ¿se puede apuntar a todo esto con la cámara fotográfica? ¡Seguro que sí!, pues «las fotografías son parte de las relaciones públicas» y «las relaciones públicas constituyen una actividad misionera». Así lo formula el libro «Fotografía en el Servicio Divino», que se puede descargar a partir de ahora en formato pdf.

Sin embargo, el Servicio Divino es un encuentro con Dios. Esto tiene que ver con recogimiento y santificación, y la mejor forma para que prosperen es el silencio. Y esto implica momentos íntimos en los que uno quiere saberse protegido. Son esos instantes cuando un fotógrafo enloquecido se puede convertir rápidamente en un factor molesto, y ser motivo de indignación.

Experiencia por millones

Cómo resolver esta disyuntiva, lo sabe el autor de este libro: desde hace más de 20 años que Oliver Rütten está presente con su cámara en los Servicios Divinos, tomó unas 1,2 millones de fotos, condujo docenas de talleres e intercambió experiencias prácticas con centenares de fotógrafos.

El actual redactor de nac.today ya puso a disposición su bagaje de experiencias en 2013, en su libro digital. Ahora la Iglesia Nueva Apostólica Internacional publica una edición revisada, cuya formulación es más amplia en doble sentido: cuenta por primera vez con una traducción al idioma inglés. Además, participaron en la misma fotógrafos de todos los continentes con sus fotos preferidas.

Tips de la práctica para la práctica

Desde los acuerdos previos de preparación, pasando por los motivos posibles hasta la resolución de problemas fotográficos. Es un libro de un profesional para profesionales. ¿Jpeg o raw? Trata tanto temas sobre la técnica como el abecé del diseño de imágenes: desde la regla de los tercios, pasando por la compresión de imágenes hasta el juego con luz y sombra.

Todo muy bien, pero otros libros especializados también lo hacen, ¿o? Sí seguro, pero «Fotografía en el Servicio Divino» no sólo se ocupa de la fotografía, sino también del Servicio Divino y brinda indicaciones muy concretas:

• Cómo los acuerdos previos garantizan un desarrollo sin interferencias.
• Por qué es mejor arreglarse con la menor cantidad posible de fotógrafos.
• Cómo un fotógrafo inteligente se hace casi invisible e inaudible.
• Cómo la cámara respeta los derechos y sentimientos de los fotografiados.
• Por qué debe quedar intacto el recinto del altar.
• Cuándo las oraciones, los Sacramentos y los actos de bendición pueden estar en una imagen.

Bien, y después todavía hay dos observaciones sobre cómo un fotógrafo puede convertir, con toda seguridad, el Servicio Divino en una vivencia que nunca se olvidará… en una vivencia de otro tipo: cuando por ejemplo se publica la imagen del siervo oficiante con los ojos cerrados porque es el única foto que se tomó. O cuando para mejor iluminación del recinto del altar se esconden cuatro flashes remotos en el adorno floral.

Sazonado con humor y provisto de una amplia experiencia, el libro digital «Fotografía en el Servicio Divino» ayuda de esta manera a todos, tanto al fotógrafo que quiere y debe hacer buenas fotos, como también a la comunidad que quiere vivir el Servicio Divino.