Las enfermedades psíquicas pueden afectar a cualquiera. Si enferman los padres, los hijos también se ven afectados. Toda la familia tiene una carga enorme. Para casos así, la Iglesia regional Alemania del Sur quiere brindar apoyo a través de su obra caritativa.
La «Obra Misionera» de Alemania del Sur diferencia entre sus tareas la ayuda que brinda en el exterior y en el interior del país. Mientras que en el exterior se ocupa cada vez más de «pan, pozos y puentes» –así es su lema–, en el interior brinda ayuda humanitaria promoviendo un punto central definido anualmente. Este año el punto central que promueve es el de subvencionar a instituciones que ayudan a los hijos cuyos padres padecen enfermedades psíquicas. Para ello tiene disponible en su presupuesto 70.000 euros.
Efectos sostenibles
Si los padres enferman psíquicamente, también sufren los hijos. No sólo deben hacer frente a la enfermedad de sus padres, sino frecuentemente hacerse cargo demasiado pronto de una gran responsabilidad, adoptando roles para los cuales en realidad no están preparados. Esto tiene sus repercusiones: constante sobreexigencia, sentimientos de culpa, complejo de inferioridad. Y años más adelante, ellos mismos pueden enfermar. Frecuentemente falta la atención terapéutica y pedagógica adecuada.
«Niños olvidados», así se llama una de las instituciones que reciben ayuda de la Obra Misionera. «El entorno muchas veces no se da cuenta de lo que los niños tienen que cargar sobre sus hombros por la enfermedad de su padres. Mucho quizás se convierte en tabú», dice Susanne Raible, vocera de la Iglesia Nueva Apostólica Alemania del Sur sobre los motivos de la ayuda que se brinda. «A estos niños les hace bien tener al menos un lugar donde pueden estar despreocupados y cómodos, en el que no tengan que hacerse cargo de tareas de adultos ni ‘funcionar’ como tales». Muchos de estos niños recién vuelven a aprender allí lo que para otros niños y niñas resulta sobreentendido: jugar tranquilos y relajados.
Trabajo conjunto con instituciones especializadas
Por eso, en este año la Obra Misionera quiere apoyar principalmente los proyectos dirigidos a hijos de padres con enfermedades psíquicas. En trabajo conjunto con la «Comunidad de Trabajo Federal para hijos de padres con enfermedades psíquicas de Baden-Wurttemberg» debe llevarse a cabo la promoción de proyectos con esos fines en Baden-Württemberg y Baviera. La decisión de qué solicitudes de proyectos son las que se aprueban para recibir el apoyo financiero, la toman los miembros del comité para ayuda en el interior conjuntamente con profesionales especializados.
Al respecto dice Raible: «Se promueven diferentes proyectos para niños de diferentes edades. Por ejemplo, una de las instituciones que recibe ayuda apoya a los niños familiarizándolos primero con la enfermedad de sus padres y sus repercusiones. Circunstancialmente hasta ese momento estaban solos frente al tema». Algunas reacciones de sus padres enfermos no son fáciles de poner en su lugar por los niños, sino que producen miedos y confusión. «Si los niños experimentan por parte del enfermo estallidos donde este expresa abruptamente sus sentimientos, pueden llegar a creer que ellos son los culpables». Por eso es importante que reciban modelos con explicaciones adaptadas a la edad. «Muchas veces les hace bien tan sólo con experimentar que no estan solos con sus problemas y que existen otros niños en situaciones similares», manifiesta la vocera.
Trasfondo
La Obra Misionera es la obra caritativa de la Iglesia Nueva Apostólica Alemania del Sur creada hace 23 años. Persigue exclusiva y directamente fines caritativos, benéficos y eclesiásticos en el interior y el exterior.
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