Cuando las personas escuchan hablar de Angola piensan en petróleo y diamantes, hermosas playas, desierto y selva. Pero Angola tiene mucho más que ofrecer. Allí viven personas profundamente religiosas con sueños y esperanzas de futuro.
El país ofrece casi todos los paisajes típicos de África: al oeste, una costa de 1.600 kilómetros a lo largo del Atlántico; en el centro, el altiplano central con las sabanas, y al este, las selvas tropicales. Angola es un país de contrastes, rico y pobre al mismo tiempo. Rico en materias primas, con el petróleo, el oro y los diamantes como mayores fuentes de ingresos. Gracias a sus tesoros naturales, el país es una de las diez economías africanas más fuertes.
Sin embargo, una gran parte de la población vive en la pobreza. Muchos angoleños no tienen acceso al agua potable ni a alimentos seguros. Hay muy pocos hospitales, médicos y medicamentos. Y faltan escuelas, maestros y libros de texto.
La buena nueva sigue siendo buena
Cuando el Apóstol Mayor Jean-Luc Schneider viaje a este país del sudoeste de África a principios de mayo, visitará a sus hermanos y hermanas ante todo como un hermano. Actualmente la Iglesia cuenta con unos 330.000 miembros distribuidos en 1.800 comunidades. Diecisiete Apóstoles, entre ellos el Ayudante Apóstol de Distrito João Uanuque Misselo, recorren las diferentes provincias brindando asistencia espiritual.
La población angoleña en su gran mayoría es cristiana. Todas las familias confesionales ofrecen servicios religiosos. Solo unas pocas personas siguen adhiriéndose a la creencia tradicional en los poderes naturales, al menos públicamente. El legado de los misioneros cristianos es notorio. Solo ocasionalmente se mezclan las ideas tradicionales con el mensaje cristiano.
Luanda en el noroeste
La primera parada del Apóstol Mayor será la capital Luanda. Con dos aeropuertos internacionales, Luanda es vibrante y palpitante. Como capital de Angola se estima que tiene diez millones de habitantes. Esto la convierte en la tercera ciudad de habla portuguesa después de São Paulo y Río de Janeiro, incluso mayor que Lisboa. Y Luanda no deja de crecer. Muchas personas, sobre todo jóvenes, se instalan allí. Pero como en todas las grandes ciudades, no todo el mundo encuentra la fortuna y la felicidad.
Luanda es demasiado cara para muchos, y para los expatriados se dice incluso que es la ciudad más cara del mundo. Muchos empleados de empresas internacionales pagan alquileres elevados para vivir en un barrio seguro. Además de los interminables musseques –asentamientos que albergan a pobres de la ciudad y carecen de cloacas y eliminación de residuos, en su mayoría sin agua y a menudo sin electricidad–, hay ciudades satélite de reciente construcción que dan testimonio del crecimiento económico de la capital.
Saurimo en el noreste
Saurimo también está en el programa del Apóstol Mayor. Alrededor de 570.000 habitantes viven aquí, en el noreste del país. Saurimo obtuvo el rango de ciudad hace sólo 70 años. La Arquidiócesis Católica Romana de Saurimo se encuentra allí.
Muchos de los que oyen el nombre de Saurimo suelen pensar en la mina de Catoca, la cuarta mina de diamantes más grande del mundo. Viajar a la parte oriental de Angola siempre está lleno de dificultades. Sin embargo, un pequeño aeropuerto nacional facilita los desplazamientos. En 1986, el Apóstol Sukami Landu Ronsard visitó Saurimo por primera vez y selló allí a los primeros creyentes. Hoy la Iglesia Nueva Apostólica tiene 27 comunidades en la ciudad. El Ayudante Apóstol de Distrito Misselo, ya un nuevoapostólico de tercera generación, se siente aquí como en casa.
Cuarenta años de la INA Angola
La Iglesia Nueva Apostólica celebró su cuadragésimo aniversario en 2023. Un amplio folleto de aniversario informa sobre el rápido crecimiento de la Iglesia en este país. Ya en el primer viaje fueron sellados treinta creyentes. A finales de 1983 se habían fundado tres comunidades: Luanda, Uíge y Malanje. Luanda es también la sede de la iglesia central. La misma se encuentra en el barrio de Palanca. El Apóstol Mayor ha visitado este lugar muchas veces, la última hace alrededor de un año. En aquel entonces el Apóstol de Distrito Stefan Pöschel aún era Ayudante de Apóstol de Distrito y el Apóstol Mayor lo presentó a los muchos miles de creyentes, en el Servicio Divino.
En este próximo viaje, el Apóstol Mayor Schneider también estará acompañado por los Apóstoles de Distrito Stefan Pöschel (Alemania Occidental), John Schnabel (EE.UU.) y Kububa Soko (Zambia).
¡Bem-vindo a Angola!
Fotos: NAK Westdeutschland
