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Dondequiera, como en casa: un país cerrado se abre

noviembre 19, 2015

Autor: Peter Johanning

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Myanmar, un país exótico: muchos años excluido de la comunidad internacional en general, se convierte después de la abrumadora victoria electoral de Aung San Suu Kyi en un país con nuevas posibilidades. Esto también se aplica a la Iglesia. nac.today mira entre bastidores:

El Apóstol de Distrito por primera vez en Myanmar

Por fin llegó el momento: el 14 y 15 de noviembre de 2015 viajó el Apóstol de Distrito Urs Hebeisen de las Filipinas a Myanmar. Por muchos años trabajó allí el Apóstol David Thang, fundó comunidades, atendió y sirvió a los hermanos y hermanas. Ahora se encuentra en descanso.

Los extranjeros tenían hasta ahora dificultades para ingresar al país. Pero poco a poco esto va cambiando. Aun así, el Apóstol Fred Wolf de Tailandia y el Obispo Samuel Tansahtikno de Indonesia pudieron visitar en 2013 a unas pocas comunidades en las afueras de la capital. A pesar de que era un país cerrado, se encontraron con comunidades vivas y muy activas.

Hoy se ha vuelto a una amplia libertad para viajar a Myanmar. El proceso democrático del país está en marcha y se realiza en paz. Finalmente pudo llegar al país el Apóstol de Distrito que es competente allí. Su alegría fue indescriptiblemente grande, como escribe. «Mi primera visita fue a nuestra comunidad en Kalemyo, se reunieron allí para el Servicio Divino los siervos con sus esposas». Luego el presidente de la Iglesia siguió viaje en dirección al norte, hasta el límite con la India.

En la comunidad de Canaán más de 200 concurrentes fueron testigos de ese instante especial. Desde 1981 se realizan allí Servicios Divinos. Diez años más tarde surgió una casa de Dios hecha en madera. El Evangelista Van Huai Thang fue en todos esos años el único portador de ministerio. El Apóstol de Distrito Hebeisen ahora lo pudo colocar en el merecido estado de descanso a la edad de 74 años.

«Ciertamente», dice el Apóstol de Distrito Hebeisen, «Myanmar tiene por delante un buen futuro. Y Jesús, nuestro Señor, no abandonará a esas personas». Hoy el Primer Pastor Htan Shin Pyaung, al que llaman Mateo, es el dirigente del distrito de Myanmar.

Con un total de 80 años de actividad pasaron a descanso

El 15 de noviembre de 2015, el Apóstol Mayor Jean-Luc Schneider condujo un Servicio Divino en Zwickau. Esta ciudad está ubicada en un valle al pie de las montañas al este de Alemania, cerca de la frontera con la República Checa. La última visita de un Apóstol Mayor a la antigua ciudad sajona fue 80 años atrás. La máxima autoridad internacional de la Iglesia expresó al comienzo del Servicio Divino su postura frente a los últimos atentados terroristas acaecidos en París (ver videoclip).

Después de su prédica y después del festejo de la Santa Cena, el Apóstol Mayor despidió a dos estrechos colaboradores del Apóstol de Distrito Wilfried Klingler, competente allí, colocándolos en descanso: el Apóstol Gerald Bimberg (Sajonia) y el Apóstol Achim Burchard (Baja Sajonia).
En su alocución con motivo del pase a descanso, el Apóstol Mayor caracterizó a los Apóstoles de largos años de actividad como auténticos Apóstoles de Jesucristo. Ellos «fueron a muchas naciones» e hicieron muchos sacrificios.

El Apóstol Bimberg estuvo activo por 40 años como portador de ministerio, de ellos más de 20 como Apóstol, y el Apóstol Burchard casi 41 años como portador de ministerio, de ellos 22 como Apóstol. Ambos enseñaron a través de la palabra y la escritura, pero también a través de su ejemplo. Como punto final del Servicio Divino, el Apóstol Mayor ordenó al Anciano de Distrito Helge Mutschler (41) de Hanóver como Apóstol.

noviembre 19, 2015

Autor: Peter Johanning

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