«¡Vencer con Cristo!». Suena como un grito de batalla que resuena después de una lucha o competencia. ¿Es cristiano? El Apóstol de Distrito Urs Hebeisen abre en 2016 la serie sobre el lema del año.
Si se googlea la palabra inglesa «victory» aparecen en segundos 389.000.000 resultados de la búsqueda. Una palabra significativa, entonces. Es cierto que «victory», victoria, forma parte de la vida. El deseo de salir victorioso, ya comienza con el primer aliento. Es el deseo de supervivencia, de vencer a la muerte. Este deseo es innato. Todos quieren vencer. Nadie quiere perder o aun morir.
¿Un año especialmente difícil?
Nunca escuché un mensaje de Año Nuevo tan claro y apropiado. «¿Por qué habrá elegido el Apóstol Mayor este lema?», se levantó la pregunta. «¿Significa que será un año especialmente difícil?». No, el Apóstol Mayor simplemente es muy realista. Esto es lo que nos dice el mensaje de Año Nuevo: Vencer el mal, vencer el miedo y vencernos a nosotros mismos. Más cerca de la realidad no se lo puede formular.
La vida siempre fue una lucha y lo sigue siendo: la lucha contra la muerte. Esto es muy natural y lo es desde que los primeros seres humanos tuvieron que dejar el paraíso y las condiciones de vida perfectas que Dios les había creado. En el huerto de Edén no eran necesarias las victorias. Vencer con Cristo significa ganar la lucha por la vida eterna.
Un lema con muchas facetas
Cada portador de ministerio que ha conducido Servicios Divinos desde comienzos de año, seguramente habrá mencionado el lema del año de una u otra forma. Y cada vez se levanta un nuevo aspecto:
- «Vencer con Cristo» significa luchar la misma lucha que ha luchado Cristo, de vencernos a nosotros mismos.
- «Vencer con Cristo» significa, simplemente, hacer la voluntad de Dios.
- «Vencer con Cristo» significa lavar los pies al otro.
- «Vencer con Cristo» significa probar los espíritus, si son de Dios.
- «Vencer con Cristo» significa que reconocemos que el que está en nosotros es mayor que el que está en el mundo (1 Juan 4:1-4).
- «Vencer con Cristo» también significa confiar en Dios.
Esta lista se podría proseguir a gusto, y ya estoy expectante por saber lo que el Espíritu Santo despertará en los próximos Servicios Divinos. El Servicio Divino, también eso es «vencer con Cristo».
Acabar la carrera
Emprendámosla y luchemos con las armas de Cristo: armas que siempre salen victoriosas pero nunca hieren. En nuestro camino lograremos pequeñas victorias, y este proceso de desarrollo nos lleva a la consumación.
«Consumado es». Estas palabras de Jesús en la cruz describen la victoria de Cristo sobre el mal. O pensemos en las palabras de despedida de Pablo (2 Timoteo 4:7-8): «He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. Por lo demás, me está guardada la corona de justicia».