«Este es el primer mensaje de Adviento: Dios siempre cumple lo que promete». El Apóstol Mayor Jean-Luc Schneider lo demuestra con una gira por el pasado, el presente y el futuro.
«El Adviento es un tiempo en el que nos ocupamos de que Dios prometió algo y cumplió su promesa», dijo el Apóstol Mayor en el primer Adviento, el 1º de diciembre de 2019 cuando visitó Málaga (España).
Después de la caída en el pecado, Dios prometió el Redentor, a Mosiés le anunció un profeta perfecto, a David le predijo un sucesor que reinaría para siempre y finalmente prometió: «He aquí que vienen días, dice Jehová, en que levantaré a David renuevo justo, y reinará como Rey, el cual será dichoso, y hará juicio y justicia en la tierra» (Jeremías 23:5).
Prometido y cumplido
Y qué sucedió realmente. «Volvieron a venir otros reyes que eran peores que los anteriores», explicó el dirigente de la Iglesia. «Los romanos vinieron y ocuparon Israel». Se volvió cada vez más difícil cumplir la voluntad de Dios. «Pero justamente en ese momento Dios cumplió todas sus promesas. Envió a su Hijo sobre la tierra».
Sin embargo, solo aquel al que el Espíritu Santo se lo reveló pudo reconocer que Él era el Redentor. Es el profeta que anunciará en forma perfecta la voluntad de Dios. Es el Rey enviado por Dios». Este es el mensaje de Adviento: «Dios siempre cumple lo que promete».
Prometido para el futuro
«El Espíritu Santo nos anuncia las promesas de Dios. El Espíiritu Santo las mantiene vivas en nuestro corazón. El Espíritu Santo nos permite experimentar su cumplimiento. Esta es la tarea, la misión del Espíritu Santo también hoy», dejó claro el Apóstol Mayor. «Estamos tan agradecidos a Dios porque nos ha dado un Redentor justo. Este mensaje del Espíritu Santo, si lo dejamos obrar en nosotros, nutre el amor en nuestro corazón».
El Espíritu Santo también revela las promesas de Dios para el futuro: «Dios enviará a su Hijo, Él nos llevará consigo, establecerá su reino y todos los seres humanos podrán ser redimidos. Esto genera en nosotros una gran esperanza y nos brinda seguridad y confianza. Sabemos cómo continuará».
Cumplido en el presente
Gracias al Espíritu Santo se puede experimentar también el cumplimiento de las promesas que dio Jesucristo a la Iglesia:
- «El Señor Jesús envió a sus Apóstoles, Él está con ellos, en medio de la comunidad».
- «Él gobierna y conduce su Iglesia. Él quiere transmitir salvación, esta es la voluntad de Dios».
- «Un pecador se transforma en una nueva criatura y se desarrolla a imagen de Jesucristo».
- «Él es un Rey justo. Él ofrece salvación, no obliga a nadie».
- «Pase lo que pase, si quiero permanecer fiel lo puedo sobrellevar, Él me da las fuerzas para poder hacerlo».
«El que se deja guiar por el Espíritu Santo, lo experimenta. Siente alegría y está motivado para servir al Señor», enfatizó el Apóstol Mayor Schneider para terminar. «Este es nuestro Adviento».