Una visita del Apóstol de Distrito, un encuentro especial, 50 años de comunión. Hay muchos motivos para celebrar. No solo en Navidad, hermanos y hermanas de todos los continentes se reúnen para alegrarse juntos.
Llevar la luz al mundo
El 29 de noviembre de 2024, cada participante llevó su propia luz al Servicio Divino para la juventud previo a la Navidad. La iglesia de Bad Schwartau (Alemania) estaba iluminada únicamente con estas pequeñas fuentes de luz y las luces del árbol de Navidad. El tema del Servicio Divino, que excepcionalmente tuvo lugar un viernes por la noche, fue: “Anímate y manos a la obra”. Después, el grupo de jóvenes visitó el mercado navideño, disfrutó de pasteles, ponche, música en vivo y de la comunión.
La unidad de la Iglesia de Cristo
Numerosos ministros se reunieron el 19 de octubre de 2024 en la Iglesia Nueva Apostólica en Bata (Guinea Ecuatorial). Hablaron a los presentes el Apóstol en descanso Gonzalo Esono Aló de la Iglesia Nueva Apostólica, el Cura José Luis Mangue de la Iglesia Católica Romana, el Obispo Bienvenido Francisco Nze Ndong de la Iglesia Ortodoxa, el Pastor Alberto Motogo Nfono de la Iglesia Reformada Presbiteriana y el Pastor Ernesto Micha Ndong Aheng de la Iglesia Reformada Evangélica. Se refirieron a la Iglesia de Cristo, en qué se identifica al pueblo de Dios, qué significa la unidad de los cristianos y al retorno de Cristo. El intercambio fue moderado por el Apóstol Salvador Mitogo Obiang.
“Las diferencias no deberían separarnos”, dijo el Obispo Bienvenido Francisco Nze Ndong. “El ecumenismo nos hace ser uno, pese a tener una liturgia diferente. Si somos uno y hay amor en nosotros, entonces la Iglesia puede estar bien arraigada y nuestra sociedad podría tener más armonía”. El Cura José Luis Mangue subrayó: “Este encuentro puede marcar un antes y un después en la historia de la Iglesia de Cristo en nuestro país. Es una prueba de que podemos abrir espacios de diálogo para ver qué tenemos en común y evitar enfrentamientos. La fe cristiana debe ser más significativa”. Y el Pastor Alberto Motogo Nfono dijo hacia el final: “Somos diferentes en la forma, pero debemos ser uno en el amor”.
Bodas de oro
Los hermanos y hermanas de Los Hornos 1 de Buenos Aires (Argentina) recordaron los 50 años de vida de su iglesia. Todo estaba decorado para este día de celebración, el 20 de octubre de 2024, y reflejaba los múltiples preparativos realizados por sus propios miembros. Por ejemplo, había un cartel con el número 50 compuesto por fotos de la activa vida de la comunidad y otro de bienvenida con la imagen de las manos de los niños. El Apóstol Pedro Ramis celebró este acontecimiento especial con los creyentes y con los portadores de ministerio activos y en descanso que habían trabajado en la iglesia a lo largo del tiempo. Hubo un total de 235 asistentes al Servicio Divino. El coro de la comunidad y un ensamble instrumental enmarcaron el festivo encuentro, que concluyó con un video conmemorativo y un “feliz cumpleaños” cantado en conjunto. Después hubo pastel de aniversario para compartir.
Rayos de esperanza en Surinam
La organización holandesa de ayuda Stichting Corantijn que trabaja sobre todo al otro lado del Atlántico, en Surinam, llevó allí una gran alegría en octubre. La organización caritativa pudo ayudar a tres familias de Paramaribo y Dankbaarkondre con paquetes de alimentos, productos de higiene y ropa de bebé. Las tres familias son un reflejo de la vida misma: la primera familia acababa de dar la bienvenida a un recién nacido, la segunda familia estaba en la mitad de la vida por su edad y la última familia estaba llegando lentamente al final de la vida de sus miembros.
Alegría por el Apóstol de Distrito
Ocho comunidades en Cotobato del Sur (Filipinas) recibieron a mediados de octubre por primera vez al Apóstol de Distrito Edy Isnugroho. Acompañado por los Apóstoles Samuel Tansahtikno y Medie Sabal, el presidente de la Iglesia de Asia del Sudeste visitó del 12 al 20 de octubre las comunidades Lamkanidang, Lalawan, Lamtlosong, Upper-Linan, Datal-Ngisi, Datal-Bukay, Estorninos y Almatac. Para ello, el Apóstol de Distrito se enfrentó a todos los desafíos: viajó a las comunidades en auto, moto o a pie, a veces por carreteras sin asfaltar. Fue muy bien recibido y llevó mucha bendición. Por ejemplo, durante este viaje el Apóstol de Distrito Isnugroho dio el respectivo encargo a cinco dirigentes de distrito.