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Hacer el bien hace feliz (1): un año lleno de pequeñas buenas acciones

01 12 2025

Autor: Sophie Berg

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“¡Es tiempo de hacer el bien!”, el lema del año 2025 inspiró a hermanos y hermanas de todo el mundo. Las diferentes campañas mensuales relacionadas con el lema fueron el hilo conductor del año en la comunidad Schwäbisch Hall.

A principios de 2025, nosotros, la comunidad Schwäbisch Hall (Alemania del Sur), fuimos invitados a dar vida todos juntos al lema anual. Cada actividad mensual debía entenderse como un ofrecimiento: voluntaria, solidaria e inspiradora. La convivencia debía caracterizarse por el aprecio, las pequeñas buenas acciones y un intercambio vivo que hiciera visible el “hilo conductor del lema del año 2025”. Una estrofa del canto infantil n.º 235 nos acompañó en este proceso: “Con pequeñas obras y decir de amor, celestial morada tengo en derredor”.

“¡Los pequeños regalos mantienen la amistad!”: en marzo, el agradecimiento fue el tema central. Con pequeños gestos, palabras llenas de amor o una tarjeta de agradecimiento personal, todos pudieron expresar su aprecio. En la entrada había tarjetas disponibles que se podían entregar personalmente o distribuir de forma anónima. La campaña tenía como objetivo reforzar la conciencia del poder de un sencillo pero sincero “¡gracias!”.

“¡No hay nada bueno, a menos que se haga!”: abril motivó a convertir las buenas acciones que se llevaban en pensamientos, en acciones concretas. En el “muro de las buenas acciones” se pudieron recopilar y completar ideas. Además, se prepararon tarjetas con un saludo para los miembros de la comunidad que ya no pueden asistir a los Servicios Divinos. Las tarjetas fueron entregadas por el Pastor del hogar o por correo y todos pudieron firmarlas.

“¡Donde se canta, allí te quedas!”: en mayo, la música pasó a ocupar un lugar central. Los pedidos de cantos recopilados por los miembros de la comunidad fueron integrados en los Servicios Divinos. El Servicio Divino del 11 de mayo tuvo un carácter musical especial. Su objetivo era transmitir alegría, confianza y paz interior.

“Entusiasmo por Pentecostés”: junio estuvo marcado por la experiencia de Pentecostés. El sábado antes de Pentecostés, los jóvenes organizaron una preparación conjunta para el Servicio Divino de Pentecostés, abierta a todos los grupos de edad y organizada mediante diversas actividades grupales. Además, en la entrada se instaló un pizarrón para pensamientos inspirados por el Espíritu, que se fue llenando a lo largo del mes con impresiones y frases de los Servicios Divinos, comenzando por el Servicio Divino de Pentecostés con el Apóstol Mayor.

“Orar funciona… ¡todavía!”:en julio se invitó a la comunidad a redescubrir el poder de la oración. Se volvió a colocar la conocida “caja de oraciones”, donde se podían introducir de forma anónima peticiones, ruegos y agradecimientos. El siervo oficiante llevaba regularmente a la oración lo que decían los papelitos y, si estaban inspirados por el Espíritu, algunos pensamientos podían ser incorporados a la prédica. De este modo, el orar en conjunto se experimentó conscientemente como una fuerza unificadora.

“Cuidarse a uno mismo… todos piensan en los demás, pero yo pienso en mí”: en agosto se puso el foco en la dedicación personal. Recurriendo a Mateo 22:39, se dejó claro que el amor propio es un requisito previo para vivir el amor al prójimo. En la entrada de la iglesia había puntos de referencia: una pared llena de impulsos para la dedicación personal. Los hermanos y hermanas podían llevarse las tarjetas que les parecieran adecuadas. Atención, tranquilidad, hábitos, indulgencia o pequeños descansos en la vida cotidiana. Solo quien se cuida bien a sí mismo puede estar presente para los demás.

“Pequeñas buenas acciones, cada palabra amable…”:en septiembre, los niños de la comunidad fueron quienes adoptaron el lema del año. En la preescuela y la escuela dominical recopilaron ideas para pequeñas buenas acciones. Cada domingo se sorteaban tareas que los niños debían realizar en casa. De esta manera, se hizo tangible el hacer el bien de una manera adecuada para los niños.

“¡Quien comparte, da el doble!”: en octubre, la atención se centró en la fiesta de agradecimiento por la cosecha, junto con la gratitud por la creación de Dios y la conciencia del uso sostenible de los recursos. Como es tradición, se volvió a recaudar para los servicios sociales “Schuppachburg” de Schwäbisch Hall: alimentos no perecederos, artículos de higiene y donaciones monetarias. La campaña contó con un gran apoyo en la comunidad.

“¡La sostenibilidad es amor al prójimo experimentado!”:noviembre se centró en el tema de la sostenibilidad, entendida como expresión de la responsabilidad por la creación y el amor al prójimo. En el marco de un atardecer dedicado a la “comunidad sostenible”, se puso de manifiesto que la sostenibilidad no es una moda, sino una actitud cristiana. Se desarrollaron ideas conjuntas sobre cómo continuar con este tema en la vida de la comunidad en 2026. El mes se completó con el tradicional Servicio Divino de las luces, que trajo esperanza, reflexión y calidez a la estación más oscura del año en esa región.

“¡Es tiempo de hacer el bien!”: en diciembre participamos en la campaña “Regalos bajo el árbol de Navidad” de la Asociación Diacónica de Schwäbisch Hall. En el árbol de Navidad de nuestra iglesia se cuelgan los deseos de personas necesitadas, que pueden ser cumplidos por los miembros de la comunidad. Además, existe la posibilidad de apoyar los proyectos de donación de las asociaciones benéficas human-aktiv y nak-karitativ. Así concluimos el año con amor al prójimo y ayuda práctica.

“Lo que queda… huellas de bondad que nos acompañan”: el lema del año 2025, “Es tiempo de hacer el bien”, se ha llevado a cabo a lo largo de todos los meses con mucho compromiso, creatividad y pasión. Desde el agradecimiento por la música, la dedicación personal, la oración, la sostenibilidad y el amor al prójimo activo hasta la participación de los niños, se ha creado un arco anual lleno de vida. Cada actividad, diseñada de forma voluntaria y acogedora, contribuyó a que la comunidad pudiera hacer el bien juntos y los unos por los otros.

Foto: NAK Schwäbisch Hall


¿Y cuál es tu historia o acción relacionada con el lema del año? Esperamos recibir más envíos con descripciones y fotos o, si procede, enlaces a videos, a la siguiente dirección de correo electrónico: [email protected]

01 12 2025

Autor: Sophie Berg

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