La pandemia de coronavirus ha dejado su huella sobre todo en la labor caritativa y humanitaria. Así lo demuestra el informe financiero 2020 de “human aktiv”, que la organización caritativa de la Iglesia Nueva Apostólica Alemania del Sur ha presentado recientemente.
Por primera vez, “human aktiv” destinó más de un millón de euros a buenas causas. Es cierto que las sumas eran mucho más elevadas cuando todavía estaba activa la organización que la precedió, “Missionswerk ”, pero en ese caso también incluían muchas otras tareas de la Iglesia. La nueva organización “human aktiv” se concentra exclusivamente en actividades benéficas.
El salto por encima de la marca del millón fue posible porque se recibieron más donaciones que el año anterior. Quedaron unos 300.000 euros, que se reservarán para proyectos de ayuda en los próximos años.
Donaciones que apuntan o no a un proyecto determinado
Lo que ya se pudo observar en el año anterior también se mantuvo en 2020: las donaciones con destino específico representaron la mayor parte, con algo más de 862.000 euros. En cuanto a las donaciones sin asignación de los fondos a un proyecto determinado, llegaron a “human aktiv” casi 732.000 euros. 4.500 euros procedentes de otras fuentes de ingresos complementaron los ingresos del año pasado, por lo que el total de ingresos ascendió a casi 1,6 millones de euros.
El coronavirus pide ayuda
En 2020, el Covid-19 se convirtió en una pandemia mundial. Por ello, “human aktiv” apoyó, tanto en Alemania como en el extranjero, numerosos proyectos para combatir los problemas de la pandemia de coronavirus.
A nivel nacional, “human aktiv” dona unos 50.000 euros al año a bancos de alimentos donde los necesitados pueden comprar comida por poco dinero. Debido a la pandemia, la necesidad de muchos aumentó, pero al mismo tiempo los bancos de alimentos recibieron menos donaciones de mercadería. Por ello, “human aktiv” apoyó este año a estos bancos con casi 100.000 euros.
En el extranjero, “human aktiv” prestó ayuda de emergencia para el coronavirus, por ejemplo, a países africanos. En Yibuti, las lluvias excepcionales inundan una y otra vez las calles y las casas. Ahora, en 2020, se sumó la pandemia de coronavirus. “human aktiv” apoyó localmente a las personas con máscaras, guantes, jabones y los alimentos necesarios. En Guinea, “human aktiv” apoya desde 2011 un proyecto de salud para escolares y sus familias. Ahora fue ampliado y se han distribuido jabones a los alumnos.
Enfoque en familias de discapacitados y ayuda para catástrofes
En 2020, la organización de ayuda también apoyó muchos otros proyectos fuera del coronavirus. Enfocándose en la financiación anual de “servicios para aliviar a familias”, “human aktiv” gastó unos 75.000 euros. Debido a la demanda que tuvo a partir de 2019, esta prioridad de financiación anual tuvo continuidad un año después. El dinero se utiliza para apoyar a familias que llevan la carga de tener un hijo discapacitado. El objetivo es ayudar y fortalecer a las familias, crear un espacio para los familiares que los asisten y proporcionar apoyo y asesoramiento socioeducativo. “human aktiv” financia específicamente los ofrecimientos que no son apoyados por otros organismos.
En Zambia viven más de 80.000 refugiados. Han huido hacia allí desde los países vecinos a causa de disturbios políticos y conflictos armados. NACRO (New Apostolic Church Relief Organisation), la organización caritativa de la Iglesia Nueva Apostólica Zambia, organiza la ayuda localmente. En el campo de refugiados Mantepela, donde se alojan 15.000 refugiados de la República Democrática del Congo, NACRO está mejorando el suministro de agua potable y ampliando las instalaciones sanitarias a fin de prevenir enfermedades. “human aktiv”, así como las Iglesias regionales Alemania del Oeste y Alemania del Norte y del Este, apoyaron financieramente a la organización caritativa NACRO.
Pocos gastos administrativos
“human aktiv” se fijó el objetivo de perder el menor dinero posible en gastos administrativos. El año pasado, el gasto total en administración representó menos del uno por ciento. Una de las razones es que los costos de la asamblea general y de la junta directiva son extremadamente bajos. Debido al coronavirus, las asambleas no pudieron celebrarse in situ para la mayoría de los colaboradores. Los costos del encuentro por Zoom fueron de solo 22 euros.
Foto: Nikolaus Urban, Tafel Deutschland e.V.