La paralización de las construcciones beneficia a los niños

No habrá nuevas iglesias este año: la Iglesia regional República Democrática del Congo Sudeste ha suspendido su programa de construcciones. En su lugar, el dinero se utilizará para construir la escuela dominical.  

“Construir edificios espirituales”. Este es el lema de un año dedicado a la renovación de la enseñanza para niños en el área de actividad del Apóstol de Distrito Tshitshi Tshisekedi. Ya lo habían decidido los Apóstoles y Obispos en julio del año pasado. 

Con ello siguen un objetivo que el Apóstol Mayor Jean-Luc Schneider había fijado durante la asamblea de Pentecostés de 2015 en Zambia: “Enseñar a los portadores de ministerio y establecer la escuela dominical para niños en todas las comunidades. Ese es mi programa para África”. La Iglesia Nueva Apostólica RD del Congo Sudeste cuenta con casi dos millones de miembros, lo que la convierte con gran diferencia en la Iglesia regional más grande.

Nombramiento del coordinador de distrito y su ayudante

Juntos, los siervos dirigentes de la RD del Congo Sudeste decidieron detener la construcción de edificios de iglesias en 2025 para invertir en la formación de maestros y la impresión de material didáctico para enseñar a los niños. La Iglesia regional utiliza los nuevos materiales didácticos para niños publicados por la Iglesia Nueva Apostólica Internacional.

La formación de maestros sigue el principio de “formar al formador” en varios niveles. En diciembre de 2024 comenzó la formación de maestros en el nivel 1. Esto incluye al Apóstol de Distrito, Apóstoles líderes (un nivel de conducción comúnmente utilizado en África) y líderes regionales, 15 personas en total.

En enero de 2025 se estableció por primera vez una coordinación a nivel de toda la Iglesia regional para la formación de niños. El dirigente de distrito Gilbert Mwana Bute de Lubumbashi fue nombrado coordinador de distrito y Aimée Ngalula de Kananga fue nombrada su ayudante.

Certificados después del Servicio Divino

El mes de marzo se dedicó a la formación de maestros del nivel 2. Entre ellos se encuentran los Apóstoles y los Obispos, así como de los responsables en los distritos de Apóstol.  Esto significa que cada Apóstol y cada Obispo son los maestros principales en sus respectivas áreas de actividad. Cuentan con el apoyo de dos especialistas, normalmente un hombre y una mujer.

El programa de formación abarcó 40 de los 42 distritos de Apóstol de la Iglesia regional y reunió a un total de 130 participantes. Todos recibieron sus certificados después de los Servicios Divinos para maestros, que se celebraron en los distritos de Apóstol de toda la Iglesia regional el 23 de marzo de 2025. En breve seguirán las áreas de actividad de Kongolo y Kalemie con un total de siete maestros, que aún faltan debido a las restricciones de viaje.

“Una tarea apostólica”

Esto significa que el Apóstol de Distrito tiene ahora en su área dos maestros que se encargan de la enseñanza de los niños, cada Apóstol líder tiene dos en su área y cada Apóstol también tiene dos en su distrito. El objetivo es, por supuesto, llegar en pasos posteriores a todas las comunidades.

Como explicó el Apóstol de Distrito durante las reuniones del pasado mes de julio en presencia de todos los Apóstoles, “la formación espiritual es una tarea apostólica”. Cada Apóstol y cada Obispo, incluido él mismo, es ante todo un maestro en su unidad espiritual, de modo que no solo se trata de supervisar el sistema de enseñanza, sino también de enseñar directamente a los niños de vez en cuando.

El centro en el triángulo

A partir del 1° de enero de 2026, la educación de los niños se estandarizará en toda la Iglesia regional, al igual que la prédica de los Pastores con el anuario “Pensamientos Guía”. A partir de ese momento, solo los maestros formados y certificados con un código de identificación estarán autorizados a enseñar a los niños.

La Iglesia regional hace especial hincapié en la contribución de los miembros que han aceptado alojar a algunos maestros junto a sus familias para aliviar la carga financiera de la Iglesia y poder llegar a todas las comunidades. Esto se adapta bien al concepto del Apóstol de Distrito de un “triángulo” para la enseñanza: “Iglesia – padres – maestros”. Y el niño en el centro.