Color del sitio web:

apostles.today faith.today

Lo llamaban “Papá Ghana”

septiembre 14, 2019

Autor: Andreas Rother

Imprimir
Escúchalo

No tenía ni idea de lo que le esperaba en África Occidental, pero su corazón lleno de amor dejó huellas allí hasta el día de hoy. El 14 de septiembre el Apóstol Rudolf Schilling hubiese festejado su 100º cumpleaños.

Allí estaba parado el Anciano de Distrito, el 3 de mayo de 1969 en el aeropuerto de Acra, la capital de Ghana. Llevaba puesto un impermeable y lucía un sombrero y paraguas. Y sudaba. «Cuando llegué no tenía ni la más remota idea de lo que me esperaba», informó más de dos décadas después.

Una vez a Alemania y de regreso

El hecho de que Rudolf Schilling estuviese allí parado tenía que ver con un cierto Joseph de Graft Essell, un enfermero ghanés que había sido traído a Essen del Norte en Alemania por un médico alemán. Y un paciente de una clínica de rehabilitación de allí, un Pastor de Dortmund, lo había puesto en contacto con la fe nuevoapostólica.

Y Joseph de Graft Essell empezó a arder por su fe, ¡y cómo!: sellado en 1968, pocos meses después Diácono y un poco más adelante de regreso a Ghana con un encargo del Apóstol de Distrito Gottfried Rockenfelder. Apenas llegado a casa en Apura, cerca de Cape Coast, celebró la primera reunión de recogimiento bajo un árbol que incluía un cartel de cartón en el que él mismo había dibujado el emblema de la Iglesia. Por ser el vocero de una asociación de veteranos, viajaba mucho por Ghana.

Un Servicio Divino con público de paso

Y entonces llegó el Anciano de Distrito Schilling para fortalecer y apoyar al Diácono. Se lo pasó a buscar al aeropuerto con un pequeño ómnibus para siete pasajeros, pero ocupado por 14. Y lo primero que había que buscar era un lugar donde alojarse en la noche. Y finalmente se encontró un espacio con un catre en la oficina del gerente de un área de servicios en una carretera.

«A la mañana siguiente había Servicio Divino», informaba Rudolf Schilling en el año 1992 en una entrevista publicada en el «Calendario Nuestra Familia» en idioma alemán. Estaba presente la familia Esel y dos hombres jóvenes: «Así oficié mi primer Servicio Divino en Ghana. Las puertas y las ventanas estaban abiertas. La gente entraba y miraba qué estaba pasando. Era algo desacostumbrado para nosotros».

Una entidad caritativa como monumento

Ese fue el primero de varias docenas de viajes que emprendió como Anciano de Distrito, Obispo (desde 1972) o Apóstol (desde 1976), solo o con el Apóstol de Distrito Rockenfelder, a Ghana, Nigeria y Togo. Y así fue el comienzo del crecimiento de la Iglesia Nueva Apostólica también en otros países del oeste africano, como Benín y Costa de Marfil.

Hoy la Iglesia Nueva Apostólica cuenta solo en Ghana con unos 420.000 miembros. Y de cuánta relevancia goza allí este pionero de la fe, se vio por ejemplo un año después de su fallecimiento. En 1994 la Iglesia y la comuna de Maase inauguraron juntos un hospital con diez habitaciones, la «Apostle Schilling Memorial Clinic».

Dos palabras, una declaración de amor

El hecho de que se construyese semejante establecimiento reflejaba totalmente lo que él pensaba. Al fin y al cabo, Isaías 61:1 fue uno de los textos bíblicos que lo acompañaron toda la vida: «El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel».

«Esa fue en realidad mi vida y también mi trabajo», dijo el Apóstol Schilling en la entrevista: «consolar, vendar, curar heridas». Un corazón lleno de desvelo y amor irrefrenable, dieron fe de ello el Apóstol Mayor, Apóstoles de Distrito y Apóstoles también en sus honras fúnebres en septiembre de 1993. Y los hermanos y hermanas en la fe fueron directo al grano con dos palabras, llamándolo «Papá Ghana».

septiembre 14, 2019

Autor: Andreas Rother

Imprimir