El valle se encuentra totalmente seco, las viviendas allí son baratas y se construyen rápidamente. Entonces la lluvia torrencial lo convierte en un río impetuoso que toma velocidad… El fundamento elegido es decisivo para la muerte y la vida, explica Jesús hace 2000 años.
Muchas aldeas de Oriente Medio estaban en las laderas de las montañas. Las casas se levantaban sobre las rocas, con la roca tallada formando un muro. Esto hacía que las casas estuvieran a salvo de vientos y tormentas. Algunos constructores, sin embargo, tomaban el camino más fácil; no construían sobre piedra, sino sobre el suelo arenoso y seco del valle. Esto era más rápido y menos costoso, y en el paisaje, casi siempre seco, rara vez constituía un problema. Pero cuando cayó un chaparrón, el soleado valle se transformó en un río impetuoso. Las casas construidas sobre la arena se inundaron, fueron arrastradas y destruidas. La casa construida sobre la roca o en la roca quedó en pie.
Con esta imagen, Jesús explicó que era importante no solo escuchar su discurso y sus mandamientos, sino también ponerlos en práctica. La parábola también pretendía decir que no bastaba con tratar el Evangelio superficialmente. Más bien, se deberían ocupar del verdadero núcleo.
¿Crees solo porque tus padres, tu pareja creen? Sí, esto crea conexiones, facilita la convivencia, reduce las posibilidades de conflicto, … Pero si faltaran todas estas conexiones humanas, si estuvieras completamente solo: ¿Seguirías creyendo?
¿Tu ofrenda se liquida de forma automática? Una orden permanente de transferencias periódicas en línea es rápida de establecer, cómoda, sin dinero en efectivo y en algunos países también permite reducciones de impuestos. A pesar de toda la regularidad, de toda la digitalización, ¿tu ofrenda sigue siendo una petición auténtica? ¿Sigue siendo lo más importante el deseo de tu corazón de devolver algo a Dios por gratitud?
¿El Servicio Divino es solo una cita en serie en tu calendario? Es práctico y se puede configurar con unos pocos clics: una cita recurrente para los próximos meses. ¿Ir a la iglesia formaría parte de tu semana incluso sin una anotación en el calendario, o los pocos momentos libres se verían rápidamente repletos de otras cosas? ¿Anhelas un encuentro con Dios, con una hermana o hermano en la fe?
¿Solo reconoces en el Evangelio un programa de trabajo, deberes y mandamientos? Jesús ha mostrado mucho y ha exigido mucho. Hay mucho que hacer y nadie podrá hacerlo todo. Pero el Evangelio no solo contiene tareas, sino que muestra todo el amor de Dios por los seres humanos. ¿Reconoces este núcleo esencial o solo estás arañando la superficie? ¿Te emociona el amor de Dios? Una comprensión profunda es posible incluso sin estudiar teología; una mirada intensiva a la Biblia ayuda.
¿Sigues esperando la bendición porque has hecho algo grande para Dios? Cada uno de nosotros ha hecho ya mucho por Dios y por el prójimo. Y luego está el mandamiento de la siembra y la cosecha, del sacrificio y de la bendición… al menos debe poder tomarse algo de lo que hemos puesto, ¿no? ¿Reconoces la bendición en lo que Dios te da? ¿O has llegado a un punto muerto con tus expectativas y deseos?
El Evangelio no es un cuento de buenas noches, un cuento corto para pasar el momento. El Evangelio quiere cambiar tu vida y darle sentido. Con la parábola de los dos cimientos, Jesús hizo un llamamiento urgente al compromiso intensivo con el Evangelio y también a su puesta en práctica. Esto garantiza un fundamento sólido para la propia casa de la fe. La fe personal recibe un fundamento que no permite que sea destruida ni siquiera por “el viento y el tiempo”.
El Servicio Divino de Saber bíblico de septiembre de 2021 se basó en la parábola de los dos cimientos (Lucas 6:47-49). En esta parábola, Jesús confirma la autoridad y la eficacia de su palabra. En Mateo 7:24-27 también se cuenta una historia paralela.
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