Servicio divino de consuelo para el Apóstol Mayor en descanso Richard Fehr
Zúrich. El Apóstol Mayor Jean-Luc Schneider dijo que su antecesor en el cargo fue un «hombre sabio y con visión de futuro». Con motivo del servicio divino de consuelo para el valorado y querido Apóstol Mayor, que dirigió a la Iglesia Nueva Apostólica durante 17 años (1988 – 2005), gran parte de los dirigentes de las iglesias regionales en todo el mundo participaron del mismo. En la iglesia de Zúrich-Hottingen se despidieron con agradecimiento y tristeza de Richard Fehr, que partió a casa el 30 de junio, poco antes de cumplir los 74 años.
Zúrich. El Apóstol Mayor Jean-Luc Schneider dijo que su antecesor en el cargo fue un «hombre sabio y con visión de futuro». Con motivo del servicio divino de consuelo para el valorado y querido Apóstol Mayor, que dirigió a la Iglesia Nueva Apostólica durante 17 años (1988 – 2005), gran parte de los dirigentes de las iglesias regionales en todo el mundo participaron del mismo. En la iglesia de Zúrich-Hottingen se despidieron con agradecimiento y tristeza de Richard Fehr, que partió a casa el 30 de junio, poco antes de cumplir los 74 años.
Cientos de hermanos se despidieron ayer por la tarde del Apóstol Mayor en descanso Richard Fehr, en la Iglesia Nueva Apostólica de Zúrich-Hottingen. El servicio divino de consuelo se transmitió vía satélite (con imagen y sonido) en toda Europa.
Gran consternación
«Necesitamos Tu ayuda, Tu consuelo» – en la oración inicial del servicio divino, el Apóstol Mayor Jean-Luc Schneider expresó con mucha emoción los sentimientos y los pensamientos que conllevaban y conllevarán en el corazón la familia en duelo y muchos hermanos en la fe en todo el mundo.
En sus primeras palabras, el Apóstol Mayor refirió a la necesidad de los hermanos de reunirse en esta tarde en la iglesia de Zúrich-Hottingen así como en las comunidades conectadas. El anhelo de dar gracias a Dios por toda la bendición, todo lo bueno que se recibió del Apóstol Mayor Fehr, y de rogar por su esposa Sonja, su hijo Richard y para la familia de luto.
El Apóstol Mayor sirvió con la palabra bíblica de Hebreos 13: 7: «Acuérdense de sus dirigentes, que les comunicaron la palabra de Dios. Consideren cuál fue el resultado de su estilo de vida, e imiten su fe». El Apóstol Mayor fue un maestro maravilloso. Todos que lo han conocido, han podido aprender mucho de él. Fue un maestro en la prédica de la palabra, ya que tenía el don de decir las cosas claras con pocas palabras. «No a la nivelación» y «Muchas cosas han podido con muchos» – dos ejemplos de su excepcional fuerza y capacidad de expresión.
El Apóstol de Distrito Wilfried Klingler describió al Apóstol Mayor Fehr como un brillante. Un brillante tiene muchas facetas y algunas de ellas han sido mencionadas durante este servicio divino de consuelo.
Un hombre de la fe y del amor
La fe en la omnipotencia de Dios fue una característica de su ser, su vida y de su obrar. El Apóstol Mayor Schneider subrayó la fe fuerte y viviente del Apóstol Mayor Fehr, su fe en el amor de Dios, en la obra de redención y su confianza en Dios. Tenía esta confianza hasta el final, también durante su enfermedad. Haga lo que haga Dios, Él lo hará bien – Demostró esta confianza inamovible.
También creyó firmemente en el amor de Dios. Esta fe le dio fuerzas, motivación y energía, incluso cuando estuvo enfermo. Su confianza en Dios fue absoluta, porque sabía que Dios hace las cosas por amor y lo hace bien.
Su amor hacia los hermanos en la fe también fue enorme. Viajó mucho, también a los países donde no había muchos creyentes. «Quiso a cada uno de los hijos de Dios y quiso que todas las culturas, todas las tradiciones y todas las biografías diferentes se sintieran bien en nuestra Iglesia», comentó el Apóstol Mayor Schneider.
El Apóstol Mayor Fehr amó a todas las personas, sobre todo a los cristianos. Era muy importante para él que los cristianos nuevoapostólicos tomaran en serio y valoraran sus contemporáneos con otra fe.
Un hombre con sabiduría, visión de futuro y coraje
El Apóstol Mayor Jean-Luc Schneider describe su antecesor como un hombre de mucha sabiduría y con visión de futuro. Siempre tuvo sentimientos para la Iglesia internacional y promovió la globalización dentro de ella. Las mayores exigencias por el rápido crecimiento de la Iglesia, sobre todo en África y Asia, fueron controladas, también desde la perspectiva financiera. El Apóstol Mayor Noel Barnes valoró al Apóstol Mayor Fehr como un cabeza de la Iglesia visionario, prudente, capaz de tomar decisiones valientes que han surtido efectos de bendición.
Su periodo como Apóstol Mayor es representado por la apertura y la tolerancia. En concreto fomentó el desarrollo de la Iglesia con respecto a cuestiones teológicas. En 1999 fundó el grupo de proyectos Ecumenismo, posibilitando el frecuente intercambio oficial con otras iglesias.
El actual cabeza de la Iglesia también hace hincapié en el humor sutil de su antecesor. El Apóstol Mayor fue alegre, tuvo una esencia amable y lleno de humor – «nos acordaremos de esto.» Asimismo, el comportamiento ejemplar del Apóstol Mayor en el periodo de descanso fue un verdadero apoyo en poder llevar a cabo su propio encargo. «A todos nos facilitó el servir y conducir.»
Ejemplo y maestro
Casi nadie tuvo la profunda perspectiva en la Iglesia Nueva Apostólica como él, prosiguió el Apóstol Mayor Schneider. Experimentó y vio tanto, supo tantas más cosas que todos nosotros. A pesar de ello, tuvo esta fe firme. El amor hacia Dios fue su fuerza, motivación y la energía para poder servir.
El Apóstol Mayor fue un gran dirigente y maestro, comentó el Apóstol de Distrito Andrew Andersen. No sólo aprendió lo que llegó de Dios, vivió la obra de redención con un enfoque claro: la conciencia de la voluntad de Dios. El Apóstol de Distrito hizo mención de una palabra que el Apóstol Mayor usó una vez en un acto de sepelio: «No fue la enfermedad quien lo quitó de esta tierra, sino el amor de Dios». Que esto sea un consuelo para la familia y todos los hermanos en la fe.
17 años de Apóstol Mayor
Richard Fehr nacía el 15 de julio de 1939 en Flaach (Suiza). A los 22 años de edad acepta el primer cargo de la Iglesia. En 1988 se convierte en Apóstol Mayor de la Iglesia Nueva Apostólica, un ministerio que ocupa durante 17 años. Cuando en Pentecostés de 2005 pasó al descanso, el número de miembros de la Iglesia Nueva Apostólica había aumentado hasta los 10 millones de creyentes. En ese momento, con motivo de la puesta en descanso, su sucesor inmediato, el Apóstol Mayor Wilhelm Leber, lo describió como un portador de ministerio lleno de amor. Su amor hacia Jesús y hacia los creyentes fue ejemplar. Abrió puertas, dio muchos impulsos nuevos y mostró coraje y visión de futuro, según las palabras de agradecimiento.
Condolencias del Vaticano
Durante los últimos días la Iglesia Nueva Apostólica ha recibido cientos de condolencias. De esta manera muchas personas expresan su compasión con la partida a casa del Apóstol Mayor. Entre ellas también el cardenal Kurt Koch, presidente del consejo de unión en el Vaticano. El envió su condolencia al Apóstol Mayor Schneider en la que mostró la lástima que siente y desea que la Iglesia Nueva Apostólica sienta la cercanía de Dios. Orará por el Apóstol Mayor deseándole la paz y la eterna comunión con Dios. El Apóstol Mayor se alegra mucho por las frases de compasión y agradecerá al cardenal Koch por escrito.