Junto con otros tres se presentó ante el altar en 1986 para asumir una tarea especial. Fueron los primeros Ayudantes Apóstol de Distrito en la historia nuevoapostólica. Hoy John W. Fendt Senior habría cumplido 100 años.
El 8 de junio de 1986, el Apóstol Mayor Hans Urwyler se dirigía a los cuatro Apóstoles en Kitchener (Canadá): “Hace algún tiempo, el Apóstol de Distrito Kraus se dirigió a mí para hablar sobre el futuro de su distrito”.
Cuatro Ayudantes para una gran área de actividad
El Apóstol de Distrito Michael Kraus era responsable del área de actividad de Canadá y, tras el pase a descanso del Apóstol de Distrito John Peter Fendt el 10 de julio de 1966, también se hizo cargo de EE. UU. Debido a que esta área crecía constantemente –no solo porque se iban agregando constantemente nuevos hermanos y hermanas, sino también nuevos países de los que ocuparse– se acordó establecer una nueva función.
“El Apóstol de Distrito Kraus recibirá hoy cuatro Ayudantes Apóstol de Distrito, que trabajarán estrechamente con él en el futuro”, dijo el Apóstol Mayor durante el Servicio Divino festivo en Kitchener. “Ellos serán responsables del bienestar espiritual de las almas que les sean confiadas. Sin embargo, el Apóstol de Distrito Kraus seguirá dirigiendo todo el distrito de Apóstol”.
Fueron nombrados Wilbert Vovak, Erwin Wagner, Leonard Ernest Kolb y John William Fendt, el hijo del Apóstol de Distrito americano ya fallecido. Sabían que no se les había confiado una tarea fácil, pues el área de actividad de su Apóstol de Distrito abarcaba no solo Canadá y EE. UU., sino también muchos países de Centroamérica, África y Asia, así como Gran Bretaña. El Apóstol Mayor los animó: “No hagamos nada por nuestra cuenta, siempre debe ser el Señor quien dirija y guíe todo en su Obra. Tened buen ánimo, el Dios eterno estará a vuestro lado, como hasta hoy”.
Aprender a tener fe
Hace exactamente 100 años, el 25 de noviembre de 1924, nació en Nueva York (EE. UU.) el futuro Ayudante Apóstol de Distrito John W. Fendt, hijo del entonces Evangelista de Distrito John P. Fendt. “Aprendimos el valor de la oración de nuestra madre fiel y temerosa de Dios a una edad temprana”. Incluso cuando sus dos primogénitos eran niños pequeños, se los llevaba de visita. John se aburría mucho allí, pero su madre le explicó que quería utilizar sus dones para la Iglesia y así influir en el futuro.
Más tarde, John se involucró en la comunidad, tocando en la orquesta y cantando en el coro. Encontró trabajo en el departamento de estadística de una compañía de seguros de vida. Entonces llegó la Segunda Guerra Mundial y en el transcurso de la misma John W. Fendt fue enviado a Canadá. Se dice que el consejo que le dieron fue: “Ve a Kitchener y busca a Michael Kraus, no importa lo lejos que tengas que conducir. Allí es Pastor. Cuando lo conozcas, tendrás un amigo para toda la vida”. Así que el primer domingo, John W. Fendt se dirigió a Kitchener, a unos 100 kilómetros de distancia.
Una vida para la Iglesia
Después de la guerra, John W. Fendt trabajó en el departamento de equipos de una compañía telefónica. Fue ordenado Diácono en la Navidad de 1946. Siguieron otros niveles de ministerio y, cuando el 9 de septiembre de 1951 llegó a ser Anciano de Distrito, renunció a su trabajo por consejo del Apóstol Mayor Johann Gottfried Bischoff para trabajar solo para la Iglesia y ayudar a su padre en la administración de la gran área de Apóstol de Distrito EE. UU.
Un año más tarde, el 23 de marzo de 1952, John W. Fendt se casó con Lillian Stier: tuvieron dos hijos, Elizabeth y John W. Junior.
Compromiso total con los hermanos
Como Ayudante de su amigo Michael Kraus, John W. Fendt también era responsable de los países de habla hispana. Por ello aprendió el idioma y pronto pudo atender a los inmigrantes en EE. UU. en su lengua materna. Así sentó las bases para la Iglesia Nueva Apostólica en México, Honduras, Guatemala, República Dominicana y Puerto Rico.
Durante su período ministerial también se comprometió especialmente con los hermanos y hermanas jóvenes. Organizó los primeros días de la juventud en Bolivia, Ecuador, Perú y Colombia e informó sobre los días de la juventud en su área de actividad para la revista alemana “Nuestra Familia”. Además, escribió cartas a los jóvenes en las que llamaba a la tolerancia y el amor al prójimo: “Donde actúan el amor y la gracia divinos, ya no hay odio, los prejuicios y la intolerancia se desvanecen”.
John William Fendt no pasó a descanso ministerial hasta el 4 de agosto de 1996 a la edad de 72 años. El Apóstol Mayor Richard Fehr rindió homenaje a su colega después de casi 50 años de ministerio, 29 de ellos como Apóstol y Ayudante Apóstol de Distrito: “Ayudó a edificar la Obra de Dios en innumerables países del mundo. Su compromiso a menudo llegó al límite de sus fuerzas físicas. Por ello le concedemos un tiempo algo más tranquilo y le deseamos mucha felicidad interior y abundancia en su estado de descanso”.