Un salto al agua helada y el bautismo de fuego al mismo tiempo: así comenzó su carrera como comunicador, incluso antes de trabajar para la Iglesia. Ahora Peter Johanning se ha retirado como responsable de los medios de comunicación.
A mediados de los años 90, una ola de críticas se abatió sobre la Iglesia Nueva Apostólica. Se trataba de pretensiones de absolutismo y de control del comportamiento. Los acusadores eran antiguos miembros. Esto llegó hasta los estudios de televisión, por ejemplo, a un conocido programa de entrevistas de un canal sensacionalista. Debido a su experiencia en los medios de comunicación, Johanning debía representar oficialmente a la Iglesia allí.
Una invitación con consecuencias
A pesar de todos los ataques, este competente periodista se mantuvo amable, tranquilo y confiado. Esto dejó su impresión. Inmediatamente recibió una invitación a Zúrich, y volvió como empleado de la Iglesia. El Apóstol Mayor Richard Fehr había contratado al responsable de medios de comunicación.
No fue un trabajo fácil: “La Iglesia todavía estaba muy encapsulada”, recuerda el actual Apóstol Mayor Jean-Luc Schneider. “Uno se defendía, reaccionaba a los ataques. La comunicación era igual a estrés”.
Explorador en un territorio nuevo: Internet
Peter Johanning se puso al hombro la gigantesca tarea. Llevó la comunicación de la Iglesia de la Edad de Piedra a la actualidad. Se apoyó en Internet en una etapa temprana. El sitio web nak.org, la madre de todos los sitios de noticias de la INA, se puso en línea en 1997, una buena década antes que el portal de noticias del Departamento de Medios de Comunicación de la Iglesia.
Este trabajo culminó con la creación de los “Servicios de Comunicación de la INAI” en 2015. El equipo que trabajaba en estrecha vinculación con los colegas de las Iglesias regionales tenía ahora sus propios integrantes. Y la cartera se amplió para incluir al portal de noticias nac.today, la revista para los miembros community y toda una serie de aplicaciones para teléfonos inteligentes.
Siempre buscando lo bueno
Johanning se tomó los ataques externos –a menudo por debajo del cinturón– con profesionalismo. Lo preparó para ello un amigo paternal, psicólogo y predecesor en el ministerio de Anciano de Distrito.
Caracteriza a Johanning una capacidad casi indestructible, adquirida durante este tiempo o tal vez innata: no importa cómo se presente su contraparte, él solo reacciona en cuanto ha encontrado algo bueno en su contraparte. Y siempre encuentra lo bueno en su prójimo.
Conocedor de la Dirección de la Iglesia
Su capacidad de adaptación lo ayudó a trabajar con tres Apóstoles Mayores: “El Apóstol Mayor Leber, el Apóstol Mayor Fehr y también conmigo”, dijo recientemente el actual Apóstol Mayor Schneider en la fiesta de despedida en Zúrich. “Lo cual no fue nada fácil, porque las personas son fundamentalmente diferentes”. Pero “los tres tuvimos plena confianza en ti”.
Johanning estuvo muy bien conectado con el círculo de los Apóstoles de Distrito. No es de extrañar, pues desde hace tiempo es el participante más veterano de la asamblea de Apóstoles de Distrito. Así que el portavoz de la Iglesia conocía muy bien los antecedentes y podía animarse a algunas cosas. De este modo, también consiguió nuevas oportunidades para informar en sus nuevos medios de comunicación.
Johanning sigue activo como Obispo, así como en su labor ecuménica de vanguardia. Como el capitán de la comunicación de la Iglesia Nueva Apostólica, se despide del barco tras 26 años de servicio. Como es sabido, desde el cambio de dirección en 2013, todos los hermanos en la fe son ahora Ayudantes del Apóstol Mayor. En este sentido, Peter Johanning no ha abdicado en absoluto.
Foto: Marcel Felde