Remasterizado: “Spirit-renewed”

Fue el emocionante final de un inspirador Servicio Divino de Pentecostés. “Spirit-renewed” marcó el punto culminante y final musical. De dónde viene la obra y cómo fue creada.

Falta la marimba. Se han vuelto a remezclar más de 30 pistas de audio y seis perspectivas de cámara originales del Servicio Divino de Pentecostés en la iglesia de Tafelsig (Sudáfrica). Y falta la marimba. Eso no es posible en absoluto. Porque el instrumento de percusión parecido a un xilófono desempeña un papel importante en una parte central de la furiosa pieza final, que entusiasmó a los numerosos espectadores de todo el mundo.

El lema interpretado musicalmente

“Spirit-renewed” (“Espíritu renovado”) fue el lema de la fiesta de Pentecostés 2023 en Ciudad del Cabo. Es la continuación de las asambleas celebradas en el mismo lugar en 2006 y 2010. Primero el lema fue “Espíritu vivo” y después “Un Espíritu, una meta”.

“Spirit-renewed” fue el nombre del final musical del Servicio Divino de Pentecostés. 140 compases, 34 pentagramas, una obra para dos coros, instrumentos de viento metal y viento madera, cuerdas, arpa, piano, órgano y, por supuesto, percusión. El compositor John Rodriques habla de un “himno al estilo clásico occidental”, pero con una parte africana. Y esta parte fue la primera.

Con ritmo y en alternancia

“Taka tataa, taka tataa”: este ritmo con acentuación cambiante (síncopa) pasó por la mente del músico cuando pensó en escribir su propia obra especialmente para Pentecostés 2023. Dirige el departamento de música de la Iglesia regional África del Sur, compuesto por cuatro miembros, y fue el responsable del programa musical.

“Taka tataa, taka tataa”: este ritmo encabeza la parte africana de “Espíritu renovado” a partir del compás 42, con el canto alternado entre el coro de niños y el coro masculino. “Spirit-renewed”, “we'll walk in love” (“andaremos en amor”) y “we'll shine your light” (“haremos brillar tu luz”), así dice la letra. Y después entraron en acción los instrumentos rítmicos, incluida la marimba.

Entre la confusión y el entusiasmo

“Con espíritu”, “con energía”, “etéreo”. Así dicen las indicaciones para el coro, un tanto al margen de las descripciones habituales de la interpretación musical. Reflejan lo que John Rodriques lee del acontecimiento de Pentecostés registrado en Hechos 2.

Así, la obra comienza tranquila y misteriosamente, para desplegarse con fervor al máximo volumen tras solo diez compases. Más tarde, se suceden pasajes con acordes disonantes, que describen el hablar en lenguas extranjeras y la confusión de la multitud que se agolpa.

Estrofa, estribillo, estrofa, estribillo, puente. Esta es la estructura de la obra que fue creada en dos semanas. Y en el tercer estribillo llega a un furioso final. Esto no frenó a los participantes del Servicio Divino de Pentecostés, que estallaron en aplausos. “No tengo palabras para expresar mis sentimientos”, dijo el Apóstol Mayor. “Simplemente genial. ¡Muchas gracias! ¡Muchas, muchas gracias!”.

Información del artículo

Autor:
Fecha:
Palabras claves:

Andreas Rother
15.06.2023
África del sur, Pentecostés, música