Con el poder de la fe: las personalidades 2017

Chrissandra, Paxton, Julia y Sam. Cuatro nombres, cuatro personas, cuatro historias de la realidad vital de los cristianos nuevoapostólicos. Alguna triste, otra hermosa, pero siempre con gran fortaleza en la fe.

Murió a causa de un fuego cruzado en un tiroteo entre policías y criminales: Chrissandra Oppermann, 30 años, guía de la juventud en Ciudad del Cabo (Sudáfrica), acababa de llegar a su casa de una excursión con la juventud. Unas 800 personas fueron a sus honras fúnebres en agosto de 2017 en la comunidad Netreg.

"Chrissie ejerció un impacto positivo en todos los que la conocieron", dice su madre. "Ella tenía un alma hermosa", dice un político local. El último posteo de Chrissandra en Facebook proviene de Filipenses 4:19: "Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús".

Chrissie es uno de los 24 miembros de la Iglesia que perdieron su vida así o en forma parecida, sólo entre mayo de 2016 y agosto de 2017, y sólo en el área del Obispo Alwin Witten: hermanos y hermanas en la fe que fueron víctimas de las guerras entre bandas y la violencia indiscriminada.

Del coro de niños a ídolo pop

Bishop Lavis, así se llama la zona de Ciudad del Cabo en la que vivió y murió Chrissandra Oppermann. En el mismo barrio creció Paxton Fielies. Pero su vida hace poco tomó un rumbo completamente diferente.

La joven de 17 años ganó en noviembre de 2017 la última ronda del show de talentos en vivo "Idols", la versión sudafricana de "Pop Idol", "Alemania busca a su superestrella", "Nouvelle Star" y otros formatos similares de otros países. En la votación la apoyaron, no por último, sus hermanos y hermanas en la fe, pues Paxton empezó su carrera como cantante en la Iglesia, en el "Coro de Niños de la INA".

"Es una jovencita muy creyente de una familia muy creyente", informa el Apóstol de Distrito John L. Kriel. Y Paxton no lo oculta tampoco en las entrevistas de televisión. ¿Qué es lo más importante en tu vida?, se le pregunta. Su respuesta: "Dios, la familia y la música", en este orden.

Una melodía para cientos de miles

Con "Lord, have mercy on my life" (Señor, ten compasión de mi vida) en Pentecostés 2017 Julia Maier de Viena (Austria) hizo que las cuerdas del alma de cientos de miles vibraran. Interpretó la emotiva balada junto con el coro y la orquesta un cuarto de hora antes de comenzar el Servicio Divino central.

El canto surgió en virtud de la despedida de un ser querido. Aunque en él resuena la nostalgia, su texto se apoya en pensamientos de agradecimiento y esperanza: agradecimiento por el amor de Dios y cada hermoso momento vivido; esperanza por la gracia de Dios y por una existencia en nueva naturaleza.

La compositora y pianista ya incorporó su talento a temprana edad en su Iglesia, primero en la comunidad, después también en campamentos musicales para jóvenes, así como en el Día de la Juventud Europea y en el Día Internacional de la Iglesia. El punto culminante fue esta fiesta de Pentecostés, dice: "Una bendición tan grande que casi me supera".

En el altar usando todo el cuerpo

También un intérprete dejó una impresión fabulosa en la fiesta de Pentecostés 2017. ¿Quién es ese hombre que trabajó tanto en el altar junto al Apóstol Mayor? Muchos se lo preguntaban tras haber visto la transmisión del Servicio Divino festivo.

Se llama Sam Mueller, tiene 46 años, es Obispo y traductor apasionado. Habla inglés, francés, alemán, español y además un poco de camboyano. "El año que viene quiero aprender italiano y después también lingala", una lengua nacional de ambos estados del Congo.

Un padre de familia, casado, "dos hijos maravillosos". En su tiempo libre le gusta trabajar en el jardín, hacer caminatas junto a sus seres queridos o escribir novelas. Una persona completamente normal, que como muchos pone mucho tiempo y corazón en su Iglesia, ayudando a que la comunión que se vive en ella se convierta en algo muy especial.

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Andreas Rother
30.12.2017
música, personalidades