Preservar los recuerdos (4): Los medios para llegar al fin

Las buenas cacerolas no convierten a un cocinero en artista, pero las buenas herramientas ya ayudaron a más de un artesano. Lo que necesita un fotógrafo para su artesanía: un panorama tomado de la práctica.

El que observa a los fotógrafos de Servicios Divinos que tienen experiencia, notará que casi no utilizan los flashes. Entre las desventajas están, no en último término, el efecto óptico del "Hola, aquí estoy". En su lugar, los profesionales generalmente usan cámaras bien grandes con objetivos también bien grandes. Por un buen motivo: se trata de atrapar la mayor cantidad posible de luz.

Un asunto del formato

Claro, un smartphone también saca muy buenas instantáneas. Pero cuando no hay luz del día, los resultados son mediocres. Pues lo importante no es la cantidad de megapíxeles, sino el tamaño del sensor que captura la imagen y la guarda. Esto alcanza las dimensiones en pulgadas desde los formatos "cuatro tercios" y "APS-C" hasta el formato completo, antes llamado películas de 35 milímetros.

Con los zooms para acercar, algunas cámaras compactas y ante todo las así llamadas cámaras bridgeya no tienen problemas. Pero como estos equipos por lo general no son muy sensibles a la luz, las fotos pronto pueden salir borroneadas o movidas.

Para cada oportunidad de intensidad de luz, una lente adecuada ofrecen las cámaras réflex de espejos o las cámaras de sistema sin espejos. Pues sus lentes se pueden cambiar, de modo que uno está siempre cerca de su objetivo. Pues, ¿quién quisiera pararse en el Servicio Divino directamente frente al siervo oficiante para tomarle una foto grande?

Observando las lentes

Los objetivos zoom que llegan desde muy lejos hasta bien cerca, no siempre son convenientes. Ofrecen una mejor calidad los objetivos que se pueden cambiar. Pero no todos los tipos se utilizan realmente en el contexto de la Iglesia, lo sabe el autor del libro, Oliver Rütten ("Fotografía en el Servicio Divino") de su práctica de hace ya 20 años. Por lo tanto, son necesarios:

  • Normal: Es el más usado que ayuda en una gran parte de las fotos de reportajes, desde el panorama, pasando por el retrato hasta la toma de cerca.
  • Ángulo amplio: Este objetivo no solo es útil para instantáneas en exteriores de edificios de iglesias, sino muchas veces es imprescindible en fotos interiores en la nave de la Iglesia, la cual sino casi no cabe en la foto.
  • Tele: Este sistema de lentes ayuda en fotografías de grandes distancias, por lo que es necesario en salones y grandes iglesias.

Otros tipos de objetivos como el ojo de pez, tilt-shift o macro sirven para finalidades muy específicas o resultan útiles como recurso de estilo en manos de fotógrafos experimentados. De una manera o la otra, aquí se trata de atrapar la mayor cantidad posible de luz. La intensidad de la luz se puede reconocer en los dígitos de los decimales (por lo general antecedida de "1"), cuanto más bajos son, mejor.

Accesorios, algo secundario

La cámara y los objetivos necesitan ser transportados. Para el camino al lugar de destino se adapta bien una mochila o una maleta. Pero fuera y dentro de la iglesia, de todas maneras, es útil un bolso para colgar o bolsos especiales para objetivos, que se pueden sujetar del cinturón del pantalón.

En ese bolso también debe haber otros accesorios: una batería de reserva para la cámara, cargada naturalmente, tarjetas de memoria adicionales, recién formateadas, y paños de microfibra para limpiar las lentes.

El experimentado fotógrafo Rütten también lleva en su bolso algunos recursos mágicos: un paraguas o protección para el próximo chaparrón y un paquete conteniendo un líquido para hacer burbujas en el caso de algunas fotos especiales de casamientos o Bautismos.



Foto: Oliver Rütten

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